Skoda está de enhorabuena. No en vano, acaba de entrar en el record Guinness… y lo ha hecho por partida doble. La ‘culpa’ la tiene su SUV eléctrico más potente, el Skoda Enyaq RS iV de 299 CV, que conducido por el periodista especializado en automovilismo Richard Meaden, acaba de lograr dos récords del mundo: el de ‘derrape continuo más largo sobre hielo’ y el de ‘derrape continuo más largo sobre hielo con un coche eléctrico’.
De hecho, ambos récords se batieron la vez, a las 11:05 horas del pasado 19 de enero, en una pista circular de 188,496 m de circunferencia en el lago helado de Stortjärnen, cerca de Östersund (Suecia).
Cronología de los dos récords del Skoda Enyaq RS iV
El primer récord que batió el Skoda Enyaq RS iV fue el de ‘derrape continuo más largo de un vehículo sobre hielo’. Y es que el piloto y periodista británico Richard Meaden mantuvo el SUV eléctrico de Skoda en un derrape controlado durante nada menos que 15 minutos y 58 segundos, durante los cuáles recorrió 7,351 km.
Este derrape tuvo dos efectos directos; el primero, batir el récord anterior del derrape más largo sobre hielo, establecido en China en 2022 y que mantuvo una longitud de 6,231 km. Y el segundo, al batir el primer récord con un coche eléctrico como el Skoda Enyaq, Meaden y la marca checa establecieron automáticamente otro récord; el de ‘derrape continuo más largo de un vehículo sobre hielo con un coche eléctrico’.
Los récords, que contaron con la presencia de un juez de la organización Guinness World Records para que diera fe de los mismos, no fueron fáciles de lograr; ni mucho menos: de hecho, se dedicaron hasta 18 horas durante cinco días para tratar de lograr el derrape perfecto. Curiosamente, ambos récords se lograron durante el cuarto día de intentos y, eso sí, tras probar numerosas combinaciones de distintos neumáticos. Finalmente, el Skoda Enyaq RS iV lograría ambos récords tras recorrer 39 vueltas al círculo durante 15 minutos y 58 segundos, durante los que alcanzó una velocidad máxima de 48,69 km/h.
En cuanto a los neumáticos, el coche utilizado para batir el récord, estrictamente de serie, lo lograría calzando neumáticos delanteros Michelin en medidas 245/35 R20 y con 600 tacos de 5 mm, para optimizar la tracción y dirección en la superficie helada. A su vez, en el eje trasero calzaba neumáticos Nokian Hakkapelitta en medidas 255/45 R20, con 300 tacos de 2 mm de longitud.
Skoda y Richard Meaden repiten récord mundial
Curiosamente, Richard Meaden ya logró un récord Guinness con un Skoda RS. Lo hizo en 2011, al establecer un nuevo récord de velocidad sobre tierra (en las legendarias salinas de Bonneville estadounidenses) para un coche de producción de inducción forzada; en este caso al volante de un Octavia RS, con que el alcanzaría 365,4 km/h.
12 años después, Meaden señalaba que “estar de nuevo al volante de otro Škoda que bate récords es muy especial […] estableciendo dos récords diferentes en dos coches muy distintos. Estoy muy orgulloso de volver a formar parte de un equipo que bate récords 12 años después: ¿quién iba a pensar que estaríamos aquí derrapando con un coche eléctrico sobre hielo? Esto demuestra lo mucho que está cambiando el mundo del automóvil”.
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