No había pasado ni un mes cuando empecé a tener problemas para arrancarlo: el testigo de las bujías de precalentamiento no se iluminaba y tenía que intentarlo repetidas veces hasta que éstas funcionaban. Lo llevé al taller oficial, donde me aseguraron que el motor arrancaba bien pero que podría tener un problema en el software, así que se lo quedaron y pidieron una centralita nueva. Pasan las semanas y el repuesto no llega; me dicen que tienen problemas con el proveedor y me ponen -pegas- para que siga utilizando el vehículo de sustitución que me prestaron, pero yo necesito el coche para trabajar y no tengo la culpa del retraso de la pieza. ¿Qué puedo hacer?
El departamento de Comunicación de Skoda nos ha comunicado que todo se ha solucionado con el cambio de la centralita electrónica. Durante el mes que el vehículo estuvo inmovilizado en el taller el cliente ha disfrutado de un coche de cortesía sin coste alguno.
