La directora de la DGT compareció ayer ante la Comisión de Seguridad Vial del Congreso de los Diputados para explicar la partida destinadas a asuntos de tráfico en los Presupuestos Generales del Estado 2013, y allí confirmó que el año que viene se destinará un millón de euros a la realización de controles antidroga -un 14,6 % de los conductores da positivo en ellos, y en un 30 % se detectó que las habían mezclado con alcohol u otras sustancias-, y que las asociaciones de víctimas conservarían los 450.000 euros que perciben al año. «A finales de este año tendremos funcionando algunas de las unidades de atención a las víctimas de tráfico, cuyo funcionamiento al completo estará vigente a partir de enero de 2013, y durante ese año se ampliarán las plantillas dedicadas a la educación vial e investigación de accidentes y sistemas de educación», comentó Seguí. Además, la implantación de la administración electrónica permitirá recolocar a unos mil funcionarios en puestos que contribuyan a la seguridad vial.
Por su parte, tampoco se reduce el dinero para campañas de información y educación: 9,62 millones de euros, y se crean las becas a la investigación en seguridad vial, para las que se han reservado 2,67 millones -200.000 € por beca-.
Los presupuestos esperan un descenso de la recaudación por multas, que fue de 432 millones de euros en 2010 y se cuenta con que será un total de 384 millones de euros en 2013. María Seguí ha explicado que esta partida se ha ajustado «en consonancia con la filosofía de concienciación social que hará que disminuyan las multas».
En 2013, la DGT gastará 21 millones de euros en combustible para controles de tráfico y helicópteros, 13 millones de euros en equipos de denuncia y 9,4 millones en sus instalaciones y en radares. Seguí quiere acabar con las «pérdidas en el sistema» por el mal funcionamiento de algunos de ellos. El presupuesto para inversiones permanece inalterado -después de caer un 52 % entre 2009 y 2012: 101,77 millones de euros, con los que se implantarán sistemas de control, la gestión de los exámenes para el permiso de conducir, agilización de trámites, etc. Los gastos corrientes en bienes y servicios ascienden a 153,50 millones de euros, y existe un gasto de 140.000 euros en comisiones bancarias por los intereses del pago electrónico que ahora permiten las administraciones de tráfico.
