
El resultado se caracteriza por no afectar a la estética fundamental del Ferrari FF, por lo que los puristas pueden respirar tranquilos. Nada de sobrecargar la silueta del FF con elementos prominentes en la carrocería. En lugar de eso, los hombres de SR se han limitado a añadir unas llantas PUR de 21 pulgadas en un acabado que denominan «Modern Black Finish». De esta manera, dichas llantas contrastan con el color blanco de la carrocería del FF SR Project Vindicator.
SR también ha añadido deflectores tanto en la parte frontal como en la trasera del FF. Por otro lado, más allá de los elementos estéticos, la suspensión ha sido rebajada -si bien más con el propósito de mejorar su aspecto que de perfeccionar el rendimiento del coche-.
El Ferrari FF es el primer superdeportivo de la marca con tracción total, montando un motor V12 de 660 CV y una transmisión de doble embrague y siete velocidades. Su gran innovación es el sistema con el que gestiona su tracción a las cuatro ruedas, el Ferrari 4RM AWD, con el que se gestiona electrónicamente y de manera independiente la potencia transmitida a cada uno de los ejes y se ahorra peso al prescindir de algunos componentes habituales en los vehículos con tracción a las cuatro ruedas.