Con la reciente llegada al mercado del Actyon Sports, SsangYong da una vuelta de tuerca más en esta tendencia.
Y es que este modelo, indudablemente basado en el rompedor Actyon, añade el plus de una estética muy distinta a la de sus competidores (mucho más arriesgada en sus planteamientos), así como rasgos que evidencian que el uso profesional prácticamente se desecha (caja pequeña y con poca capacidad de carga e interior amplio y muy confortable).
A sus características hay que añadir cualidades como un precio de salida ligeramente inferior al de sus principales rivales, así como la posibilidad de acceder a una gama de accesorios muy completa y, sobre todo, pensada para el ocio. Por todos estos factores, los responsables de SsangYong han previsto comercializar en torno a 800 unidades en España durante 2007, cifra modesta para un mercado que registró unas ventas de 15.361 pick up durante 2006.
Carrocería 7,5 ptos.
Tres cuartas partes del Actyon Sports son idénticas a las del todoterreno-cupé Actyon. Sólo la parte trasera cambia, donde se encuentra su caja de carga, que prolonga sus dimensiones hasta los 496 centímetros, 51 más que su hermano compacto. Este incremento se distribuye a partes prácticamente iguales entre la batalla y el voladizo posterior.
Estéticamente, la carrocería del Actyon Sports, compuesta a base de largueros y travesaños, conserva el aspecto juvenil, agresivo y dinámico del Actyon, en cuyo frontal se mezclan las formas redondeadas con los ángulos muy marcados de los grupos ópticos.
En la parte trasera, su diseñador, Ken Greenley, no ha podido seguir la misma tónica, pero lo ha resuelto armonizando el conjunto de una forma bastante acertada.
La caja de carga se encuentra forrada con plástico duro de serie, es la más pequeña (127 centímetros de largo por 160 de ancho y 52 de alto) en relación a las de sus competidores y la que menos puede cargar (453 kilos), lo que demuestra el carácter lúdico de este pick up.
Habitáculo 7,0 ptos.
El hecho de que el Actyon Sports tenga la caja de carga más pequeña del mercado y sea el más ancho implica una ventaja clara: ofrece un habitáculo de mayores dimensiones. Y es que su interior es igual al del Actyon, con unas plazas traseras cuyos respaldos presentan la inclinación adecuada, mucho espacio para las piernas y capaces de acoger cómodamente a tres adultos.
Además, el respaldo del asiento puede reclinarse para acoger algún bulto que no pueda llevarse en la caja.
Los asientos delanteros son bastante cómodos y sujetan bien el cuerpo, aparte de contar con las adecuadas regulaciones (mecánicas) para lograr la mejor postura frente al volante. Desde esta posición del conductor, todo se encuentra a mano (menos la maneta de la guantera).
Los materiales del interior son de buena calidad y el acabado más que correcto, a lo que se añade un equipamiento de serie interesante en la versión básica (aire acondicionado, palanca de cambios y volante multifunción en cuero, ABS con EBD, así como doble airbag frontal), que mejora bastante en la Limited.
Ésta versión cuenta además con tapicería de cuero, climatizador, llantas de aleación de 18 pulgadas y retrovisores plegables eléctricamente. Eso sí, el ESP no se ofrece ni como opción.
Motor 7,5 ptos.
En este apartado se ha seguido el mismo criterior que para el Actyon «normal»: ofrecer una única motorización, que además es la misma para ambos. Se trata de un tetracilídrico alimentado por inyección directa de gasóleo a alta presión (1.600 bares) con admisión forzada por un trubocompresor de geometría variable. Su rendimiento es bastante bueno una vez superadas las 2.000 vueltas, pero hasta llegar a ellas se muestra algo perezoso, lo que se agudiza con la caja del vehículo cargada.
Las prestaciones conseguidas con los 141 CV y 310 Nm son más que razonables, aunque lógicamente no se acercan a las ofrecidas por sus rivales que rondan los 170 CV. A cambio, los consumos se muestran comedidos, en torno a los ocho litros de gasóleo cada 100 kilómetros recorridos.
Transmisión 7,0 ptos.
De la gestión de la fuerza del motor se encarga una caja manual de cinco velocidades, la cual conserva las características de los cambios de marchas de SsangYong, esto es, unos recorridos de la palanca algo largos, pero precisos. Opcionalmente se puede disponer de un cambio automático de cuatro relaciones.
Como en el resto de los modelos de la marca, se puede elegir, mediante un pequeño mando circular situado en la consola central, entre rodar en tracción trasera, total o total en gama corta de velocidades. En el caso de esta versión pick up, no está disponible ni el control de tracción ni el de estabilidad.
Suspensiones 7,5 ptos.
Los muelles y amortiguadores de gas que acompañan al eje rígido de cinco brazos del eje trasero del Actyon Sports marcan la diferencia respecto a todos los pick up que se comercializan en el mercado español. Gracias a ellos, los ocupantes pueden disfrutar de un confort notable sobre todo tipo de superficies.
Por contra, la caja de carga no admite tantos kilos de peso como los modelos que cuentan con ballestas.
Por su parte, en el tren anterior se recurre a un esquema independiente de paralelogramos deformables.El equipo de frenos, con generosos discos ventilados delante y macizos detrás, dispone de ABS y EBD.
Por dentro y por fuera
El diseño del frontal de este modelo rompe con lo visto hasta ahora en el creciente segmento de los pick up.Sobre pistas en buen estado se muestra muy ágil y cómodo.La reductora se inserta por medio de un mando circular ubicado en el salpicadero.Diversos huecos portaobjetos se distribuyen por todo el interior del habitáculo.
El aspecto del salpicadero es bueno; su diseño resulta moderno, el conductor encuentra todos los mandos de relevancia al alcance de la mano, los acabados rayan a gran altura y los materiales empleados son correctos, salvo por el tacto de algunos plásticos.
Los asientos delanteros son cómodos, sujetan bien el cuerpo y se regulan con facilidad, mientras que en las plazas posteriores caben perfectamente tres adultos gracias al amplio habitáculo disponible.El respaldo del asiento posterior puede abatirse completamente para dar cabida a bultos que no puedan o deban ir en la caja de carga.
La palanca de cambios manual, de cinco velocidades, es bastante precisa.El cambio automático, de cuatro relaciones, se ofrece como opción por 1.600 euros.
El pick up de SsangYong es el que menos capacidad de carga tiene, pero a cambio se muestra muy ágil sobre cualquier superficie.
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Cómo va
Aunque con casi cinco metros de longitud, el Actyon Sports sorprende por su agilidad tanto en carretera como en pista y zonas trialeras moderadas en relación al resto de modelos pick up. La versión probada, con cambio manual, ayuda a incrementar esa agilidad, ya que sus relaciones son muy acertadas; de hecho se han acortado ligeramente respecto al Actyon «normal» para favorecer el carácter «carguero» del vehículo.
Además, el manejo de la palanca resulta bastante preciso. Quienes se decanten por la opción automática, ganarán en comodidad en el denso tráfico urbano y también en eficacia en campo; aunque, eso sí, perderán parte del mencionado dinamismo en carretera y pistas.
Para circular en campo, cuenta con unos cuantos argumentos que lo sitúan en una muy buena posición entre los pick up que se ofrecen en el mercado español. Para empezar, sus voladizos (sobre todo el trasero) no son excesivamente pronunciados, lo que juega a favor para obtener unas buenas cotas, especialmente de salida. A ello hay que añadir una correcta altura libre y la ventaja que proporciona la altura constante del eje trasero respecto al suelo.
También resulta un acierto el poderoso brazo de palanca de las ruedas (744 mm de diámetro para las de 16″ y 763 en el caso de las de 18″). Hay que tener cuidado, eso sí, con el ángulo ventral, perjudicado por una batalla alargada respecto al vehículo del que deriva.
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Musso sports pick up (2003-2007)
El predecesor del Actyon Sports es el Musso Sports, un pick up derivado del todoterreno familiar Musso, sustituto del menos ambicioso Family. Con el Musso, lanzado al mercado en 1995, SsangYong dio el primer paso hacia la modernidad con un diseño de Ken Greenley, responsable de los rasgos de la actual gama del fabricante coreano. Disponible con motores de gasolina (2.3 de 150 CV, y 3.2 de 220 CV) y (2.9 de 120 CV), todos de origen Mercedes, el Musso fue rediseñado en 1998, y en 2003 apareció la carrocería pick up, que llegó a España un año más tarde. Ofrecía suspensiones de muelles y frenos de disco en el eje trasero, así como un habitáculo más amplio que el de los demás pick up de doble cabina comercializados en Europa. Un mundo de accesorios
Los responsables de SsangYong España son conscientes de que el éxito de un pick up pasa por disponer de una buena gama de accesorios para personalizarlo. Así, el importador oficial de la marca coreana pretende ofrecer al menos tres tipos de cerramiento: uno sencillo, posiblemente de persiana, otro con una tapa carenada (imagen superior izquierda) y un hard top integral acristalado (imagen superior derecha), que costará en torno a los 2.000 euros. El Actyon Sports también podrá disponer de al menos dos tipos de defensas delanteras, otra trasera con soporte para la matrícula y el preceptivo juego de estribos. En cualquier caso, la gama de accesorios aún está por definir. |
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Ficha Técnica
Prestaciones
Consumo
Valoración
Equipamiento, Seguridad y Funcional
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Los rivales
Ford Ranger 2.5 TDCi.Acaba de recibir una profunda actualización para acercarse a los usuarios que buscan un pick up para el ocio. Su precio es muy interesante.
Motor: 2.499 cm3 Potencia: 143 CV a 3.500 rpm. Par: 330 Nm a 1.800 rpm Reductora: Sí Velocidad máxima: 158 km/h Precio: de 20.700 a 29.220 euros.
Isuzu D-Max 2500 Ddi.El aquilatado precio y la fiabilidad mecánica son las principales de bazas del ahora denominado D-Max. Su estética ha sido revisada.
Motor: 2.499 cm3 Potencia: 136 CV a 3.600 rpm Par: 280 Nm a 1.800 rpm Reductora: Sí Velocidad máxima: 177 km/h Precio estim.: De 20.000 a 25.000 euros.
Nissan Navara 2.5 dCi 4×4.En versión 4×4, el Navara sólo se ofrece con el motor de 171 CV, lo que le da una gran ventaja en cuanto a prestaciones.
Motor: 2.488 cm3 Potencia: 171 CV a 4.000 rpm Par: 403 Nm a 2.000 rpm Reductora: Sí Velocidad máxima: 170 km/h Precio: De 24.000 a 29.550 euros.
Mazda BT-50 2.5 CRTD.El hermano casi gemelo del Ranger dispone de las mismas cualidades que el Ford, pero sale perjudicado en cuanto al precio y red de posventa.
Motor: 2.499 cm3 Potencia: 143 CV a 3.500 rpm. Par: 330 Nm a 1.800 rpm Reductora: Sí Velocidad máx.: 158 km/h Precio: de 24.500 a 26.300 euros.
Mitsubishi L200 2.5 DI-D.Es el que se acerca más al espíritu ocioso del Ac-tyon Sports, tanto por estética como por confort de marcha. Le supera en capacidades TT y gama.
Motor: 2.477 cm3 Potencia: 136 CV a 4.000 rpm. Par: 314 Nm a 2.000 rpm Reductora: Sí Velocidad máx.: 167 km/h Precio: desde 20.890 a 27.990 euros.
Por fuera
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