En mayo de 2006 circulaba con él cuando, de repente, el cambio se puso en punto muerto y no había manera de engranar una marcha; la velocidad disminuyó bruscamente, los controles de tracción y estabilidad se desconectaron y, afortunadamente, conseguí pararme en el arcén y evitar un accidente. Tras arrancar el Corolla varias veces conseguí que la caja de cambio funcionase. Lo llevé al taller oficial donde le han sustituido el embrague completo y la centralita de transmisión pero, cuatro meses después, se repitió dos veces la avería y en el servicio oficial se limitaron a reprogramar la centralita del cambio, hasta que sucedió de nuevo y esta vez volvieron a sustituir la centralita. Sin embargo, el coche sigue igual y he decidido dejarlo en el taller hasta que me den una solución. También, he solicitado ayuda en el servicio de atención al cliente y no me han hecho caso. ¿Qué puedo hacer?
El departamento de prensa de Toyota nos ha comentado que se ha llegado a un acuerdo con Antonio por el que el concesionario recompra su Corolla Verso y se lo cambia por un Avensis 1.8 Sol con cambio manual. Éste sólo tendrá que abonar 3.000 euros -se ha tenido un gesto comercial de 4.500 euros-.