En junio de este año, cuando el coche sólo tenía 71.200 kilómetros, comence a percibir un fuerte ruido que provenía del motor. Lo llevé al taller oficial, donde detectaron un problema grave en el embrague y le cambiaron el volante motor, entre otras piezas. Tuve que pagar una factura de, nada menos, que 1.608 euros, puesto que el coche ya no estaba en período de garantía. Sin embargo, me ha comentado un amigo que es mecánico que es muy difícil que un volante motor se averíe, por lo que creo que puede tratarse de un defecto de fábrica, sobre todo teniendo en cuenta la fama de fiabilidad de la marca Toyota y que el coche tiene 72.000 kilómetros y menos de cinco años. ¿Podéis ayudarme?
El departamento de prensa de Toyota nos ha comunicado que -lamentamos la avería, pero no pueden acceder a la solicitud de Luis Miguel de cubrir el coste total de dicha intervención, ya que el coche, que hasta el momento no había presentado ningún tipo de incidencia, ya no se encuentra en período de garantía -tiene cuatro años y medio- y, además, desde los 30.000 kilómetros, el cliente no ha pasado todas las revisiones pertinentes en un taller oficial; aún así, se ha tenido con Luis Miguel una deferencia comercial de un 13% de descuento en la factura-.