Un numeroso grupo humano, al que hay que sumar las asistencias de los equipos y los periodistas que cubren el evento, cuya getión supone un reto para una organización que tampoco dispone de muchos medios, pero que, gracias a su experiencia, solventa este inconveniente con éxito.
En el aspecto puramente deportivo, la victoria fue de nuevo para el equipo húngaro que, capitaneado por Csaba Boros, desde el año 2007 viene imponiéndose en la categoría Extrem -reservada a los vehículos más preparados y cuyo recorrido presenta mayor grado de dificultad-. En esta ocasión el Jeep Wrangler de Boros sufrió un espectacular vualco al caer por la ladera de una montaña tras ser embestido por su compañero de equipo, pero esta cirunstancia no evitó que ganasen. Bastante peor suerte corrió el equipo español, compuesto por Carles Barangé y Xavi «Moorly» con un Defender 90, y Jorge Gonzálbez y Alonso González con un Nissan Patrol. La misma noche que la selección española de fútbol ganaba su primer mundial, los nuestros quedaban fuera de la competición por una rotura de motor del Nissan Patrol de Jorge Golzálbez. Un pena ya que en la primera etapa iban en cuarta posición, a menos de 4 kilómetros de la línea de meta. Pero la dureza de la categoría Extrem provoca estos contratiempos. Continuos vuelcos, impactos, impresionantes «wincheadas»… Todo ello en un terreno con fuertes desniveles, marcado por la presencia de mucho barro y donde puede sorprender en cualquier momento un tromba de agua. Un cóctel que en más de una ocasión ha obligado a los participantes a acampar improvisadamente al final de una jornada, ante la imposibilidad de alcanzar el vivac oficial instalado por la organización. En la categoría de Hobby, la victoria fue para el equipo número 75, formado por dos rumanos, un italiano y un portugués -aunque todos residentes en Rumania-. Cabe señalar que en esta categoría tomó parte un equipo oficial de Dacia, con el nuevo Duster, y que lograron terminar en 16ª posición. Una actuación no exenta de mérito, ya que se trata de un todocamino con pocos recursos para la circulación todoterreno, pero hay que tener en cuenta que contaban con unas asistencias que encargaban de dejar los coches prácticamente nuevos después de cada etapa. Carles Barangè y Xavi «Moorly» perdieron pronto sus opciones después de que el motor del Patrol de sus compañeros de equipo, Gonzálbel y González, se averiara. El cuarteto de húngaros capitaneado por Csaba Boros (segundo por derecha), que con ésta logra su tercera victoria consecutiva en la categoría Extrem. A la derecha, el Meredes G y el Jeep Wrangler que pilota Boros con maestría. Las abundantes lluvias hacen que el barro sea un compañero habitual en la TAT. Para, poder avanzar en estas condiciones se buscan vehículos con neumáticos específicos, cabrestante delantero y trasero y lo más aligerados posible, como este Defender 90 de uno de los participantes británicos. |
Unos apuntes sobre la TAT
l Si quieres participar en la TAT, tanto en Hobby como Extrem, debes tener un presupuesto aproximado de entre 2.000 y 2.500 e, que incluyen los gastos de inscripción de piloto y copiloto, gastos de transporte (combustible y peajes), hasta llegar a Deva, Rumanía. Se recomienda llevar los vehículos en remolque, ya que puede ser que al terminar la prueba, no estén en condiciones de circular por carretera. l Para participar en Extrem: Muchos vehículos montan ejes pórtico (preferiblemente de Volvo, los de Unimog son muy pesados), con largos recorridos de suspensión, y muy poca altura de carrocería respecto a los ejes. Tienen ángulos de ataque y de salida de casi 90º y van totalmente aligerados hasta en el más mínimo detalle: aprovechan el arco de seguridad como calderín y snorkel, llevan carrocerías de fibra, sustituyen cristales por metacrilato, etc., consiguiendo, así, pesos inferiores a 1.800 kg. Aunque siempre hay un excepción, y es que uno de los TT del equipo que quedó en segunda posición, pesa 2.400 kg. Eso sí, llevan dos cabestrantes hidráulicos, que mueven con soltura toda esa masa. l Para participar en Hobby: Cualquier TT (preferiblemente de ejes rígidos) con cabestrante delantero, puede participar en esta modalidad y aspirar al podium, siempre y cuando la lluvia no complique las cosas, ya que en estos casos, tienen ventaja los vehículos con mayor preparación. Aunque no solo se trata de los TT, ya que cuenta mucho la buena coordinación de los pilotos y copilotos. |
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