Jérôme Stoll, Presidente de Renault F1
¿Cuál es el funcionamiento interno de un equipo de F1?
«En Renault F1 somos algo más de 1.100 personas –N. de la R.: que trabajan tanto en Enstone, Inglaterra, donde se fabrica el coche; como en Viry–Châtillon, en Francia; sede para la fabricación del propulsor–. Aun así, y para cada carrera, la normativa sólo permite que desplacemos un máximo de 80 personas y, a veces y según nuestras necesidades, movilizamos a menos personal. De ellos, 60 se dedican a labores relacionadas con el coche y en la carrera; y aprox. otros 20 trabajan en temas de márketing, prensa, logística»
¿Y el presupuesto?
«Ferrari, Mercedes y Red Bull gastan más dinero que nosotros. En Renault, nos hemos gastado aprox. 300 millones de euros en el desarrollo del nuevo monoplaza y del motor pero, luego, obtenemos ingresos: de la FOM –empresa que gestiona los derechos de TV de la F1, paga cada año un canon a las escuderías–, de los equipos a los que proveemos el motor –N. de la R.: este año, Red Bull y Toro Rosso– y de los patrocinadores. El resultado final es que gastamos unos 100 millones de euros, una suma parecida a la de otros años, cuando sólo éramos proveedores de motores».
A finales del pasado año, el grupo de medios nortemericano Liberty Media adquirió la F1, ¿qué cambios podemos esperar por su parte?
«Sinceramente, creo que los principales cambios los decidirá Liberty. Los equipos estamos hablando mucho con esta organización y ambas partes estamos de acuerdo en que las cosas tienen que cambiar. ¿Para qué? Para incrementar el atractivo del certamen, para lograr mayor audiencia, hacer el campeonato más accesible a nuevos equipos y, a la vez, más cercano a la gente. Hay mucho que hacer y tenemos que movernos en la dirección correcta para contrarrestar la pérdida de atractivo de la F1 durante los últimos años».
¿Los equipos buscáis un mayor protagonismo en la F1?
«El campeonato no puede existir sin nosotros y la nueva directiva entiende perfectamente que tiene que hablar con nosotros para obtener lo que queremos ambas partes. Porque Liberty quiere que el negocio funcione correctamente y los equipos queremos obtener un mejor retorno del dinero que invertimos. Es una relación en la que ambos ganaremos».
Alain Prost, tetracampeón mundial
Cuatro veces campeón del mundo –en 1985, 1986, 1989 y 1993; con McLaren y Williams–, pilotó para Renault de 1981 a 1983. Una vez retirado, montó la escudería Prost Grand Prix, que participó en la F1 de 1998 a 2002. Este año, es asesor especial del equipo Renault F1.
«¿Cómo crees que pueden afectar a la F1 la nueva normativa para los monoplazas?
«Creo que será bueno para la F1 que mostremos algo diferente, que los coches luzcan más agresivos, y espero que veamos un buen espectáculo. Siempre he dicho que no estaba muy acuerdo en añadir demasiada carga aerodinámica –N. de la R.: con los cambios para 2017, Andy Green, director técnico de Force India, prevé que esta aumente entre un 20 o un 25%– y, en principio, creo deberíamos ver menos adelantamientos pero, para ser honesto, habrá que ver qué pasa en las primeras carreras. Pienso que las nuevas regulaciones pueden perjudicar a los equipos pequeños ¿El motivo? Que, a no ser que alguien encuentre una idea nueva, un concepto ganador; durante la temporada asistiremos a un enorme desarrollo de los monoplazas, lo que siempre resulta una ventaja para las escuderías más poderosas».
¿Quién ganará este Mundial?
«Si tuviera que apostar, lo haría en un 50% a favor de Mercedes y en otro 50% a favor de Red Bull».
¿Qué podemos esperar de Renault?
«Tenemos que ser realistas y el objetivo del equipo de quedar quinto en el campeonato de constructores lo es. Normalmente, no deberíamos ganar ninguna carrera: está claro que siempre es posible y podríamos lograrlo si tenemos suerte pero, sobre el papel, no creo que lo logremos».
¿Cuál será tu papel como asesor del equipo?
«No voy a tener un papel en el día a día; mi posición va a estar entre bastidores, junto a Cyril [Abiteboul, director de la escudería] y Jérôme [Stoll, presidente de Renault F1] , con el objetivo de tomar las mejores decisiones posibles para ser una escudería ganadora en el futuro. De hecho, no he colaborado en el desarrollo del RD17, y los pilotos no me han pedido consejo todavía [sonríe]. No espero que me lo pidan sobre la puesta a punto del coche, algo que sería ridículo, pero sí sobre otros aspectos: a veces, un piloto tiene que contar con alguien próximo que le otorgue confianza; y los antiguos pilotos podemos ayudar en eso».
Con la llegada de Mapfre como patrocinador del equipo, ¿ves a Carlos Sainz como piloto de Renault en un futuro?
«¿Carlos? Incluso se lo recomendé a Ferrari hace unos meses, por lo que puedes imaginar que soy un gran seguidor suyo. Hoy día no conocemos cuáles serán nuestros pilotos para 2018, pero Carlos es, seguro, uno de los jóvenes top, uno por el que muchos de los equipos están interesados».
Nico Hülkenberg, piloto de Renault F1
Este alemán debutó en la F1 con Williams en 2010, recaló en 2011 en Force India para pasar a pilotar en Sauber en 2013 y retornar a Force India de 2014 a 2016. Ha disputado 117 carreras en la F1, logrando una pole position pero ninguna victoria. Todo lo contrario que en las 24 Horas de Le Mans, donde debutó en 2015 logrando la victoria con Porsche.
¿Se discute si se producirán o no más adelantamientos en carrera debido a la nueva aerodinámica de los monoplazas. ¿Será más fácil adelantar o no? «Para ser honesto, creo que adelantar seguirá siendo bastante difícil. En realidad, no creo que haya más adelantamientos.»
¿Cómo de importante es la labor de los pilotos a la hora de desarrollar un coche?
«Desde luego, es importante. Y es que, al final, los pilotos somos los que conducimos el monoplaza y los que debemos dar el feedback a los ingenieros, a los diseñadores… para que podamos empujar todos en la dirección adecuada.
Bob Bell, Director Técnico de Renault F1
Este norirlandés nacido en Belfast ha trabajado en McLaren, Benetton, Jordan, Mercedes –de 2011 a 2014– y Renault; donde fue responsable técnico desde 2001 a 2009, cuando tuvo que asumir el cargo de director del equipo tras la dimisión de Flavio Briatore. Bell dejó la escudería francesa a finales de 2010, pero volvió a asumir la responsabilidad técnica del equipo galo a comienzos de 2016.
Los monoplazas que están presentando los equipos recuerdan mucho a los de hace 7 u 8 años –por ej., en el uso de la aleta de tiburón–. Durante su desarrollo, ¿habéis recurrido a algunas soluciones de entonces?
«No. La experiencia sobre la construcción de aquellos coches sí ha sido útil, pero desde entonces las técnicas para el desarrollo aerodinámico de estos monoplazas han mejorado mucho».
¿Cuáles han sido las principales dificultades en el desarrollo de los coches a la hora cumplir la normativa de este año? «Obviamente, la organización ha establecido nuevas reglas sobre la construcción de la carrocería de los monoplazas, por lo que hemos desarrollado una nueva aerodinámica basada en estas normas. Pero, además, los coches serán este año mucho más rápidos, por lo que hemos tenido que construirlos para que también sean más resistentes. Y hacer eso sin que aumente su peso ha sido todo un desafío. Un último obstáculo que hemos salvado es lograr que el monoplaza tenga las suficientes prestaciones para superar el aumento de carga aerodinámica debido a las nuevas reglas».
¿Cómo ves al resto de equipos?
«Me sorprendería si, de entrada, Mercedes no mantuviera la ventaja que tiene sobre el resto de monoplazas. Pero, dejando eso a un lado, y hablando de nosotros, Ferrari y Honda, resulta más difícil estimar qué oportunidades tendremos. En Renault, hemos tomado un buen camino y hemos planeado un programa agresivo de desarrollo del motor, así que iremos introduciendo mejoras en el propulsor –incorporaremos una actualización seguro; probablemente, dos– a lo largo de la temporada. Somos optimistas y creemos que podremos reducir la diferencia con respecto a Mercedes».
Las principales armas del nuevo RS17 respecto a otros monoplazas son…
«Creo que tenemos un coche fiable: el año pasado tuvimos el motor más sólido y esta temporada intentaremos mantener esa cualidad. Y eso es importante, porque lo primero, ante todo, es acabar carreras. Además, creo que tendremos un buen rendimiento general: podemos estar orgullosos de gran parte del coche; aunque hay aspectos en los que pienso que todavía estamos por debajo de los mejores equipos como, por ej., el conocimiento y el aprovechamiento de los neumáticos».
Trabajaste con Fernando Alonso cuando logró sus dos títulos mundiales –en 2005 y 2006–, ¿cómo ves sus posibilidades esta temporada?
«No es apropiado que hable de pilotos que no son de mi equipo, [protesta con media sonrisa], pero conozco a Fernando. Es un gran piloto. En cualquier equipo en el que esté da siempre el 100%, y estoy seguro de que sacará lo máximo posible del monoplaza de Mclaren el próximo año. Pero sus resultados dependerán de cómo de bueno sea el trabajo que haya realizado Honda con el motor y Mclaren con el chasis».
Con el objetivo del equipo de lograr el 5º puesto en el mundial de constructores, ¿cuáles crees que serán los rivales más peligrosos para Renault?
«Aquellos que todos podemos tener en la cabeza: Williams Force India, Toro Rosso…»
