Después de competir cuatro temporadas en GP2 y de permanecer los dos últimos años como probador de Renault, Di Grassi da el salto al Gran Circo pocos días después de los tests que realizó con la escudería gala en Jerez. Aunque los resultados obtenidos en el trazado andaluz no fueron especialmente notables, su experiencia como probador le ha servido para que John Booth, director deportivo de Virgin Racing, pusiera los ojos en él.
En la presentación del equipo, que ha tenido lugar en Nothing Hill (Londres), el brasileño no ha podido ocultar su felicidad por este salto: «Es estupendo estar aquí, es un sueño hecho realidad para mí después de dos años siendo probador. Con esa experiencia y con la GP2 me siento preparado y confío plenamente en este equipo. Estamos aquí para competir, no para perder el tiempo».
La compañía de Richard Branson, que entró el año pasado en el Gran Circo como patrocinador de la escudería Brawn GP, será el cuarto equipo debutante en el Mundial 2010, junto con las incorporaciones del USF1 estadounidense, el Campos Meta 1 español y el Lotus F1 Racing británico.
