Aunque estéticamente no podemos hablar de una revolución, sí que se aprecia cómo el exterior continúa con la actual filosofía de diseño de la marca alemana, algo que se ve perfectamente en el frontal, con una calandra más cuadriculada y el empleo de líneas horizontales paralelas en la parrilla. Gracias a ello, el nuevo Crafter presenta un aspecto en consonancia con los Caddy, Amarok y Transporter, modelos que han ido cambiando su imagen a lo largo de los últimos meses. También se ha mejorado la calidad de los materiales para las tapicerías y otros elementos del interior.
Renovación mecánica
Al margen de estos cambios, la verdadera puesta a punto la encontramos bajo el capó, donde los antiguos motores de cinco cilindros han sido sustituidos por los nuevos turbodiésel de cuatro cilindros con inyección directa common rail, más potentes y ahorradores.
En concreto encontramos tres variantes de un mismo bloque 2.0 TDI, con 109, 136 y 163 CV. El primero de ellos entrega su par entre las 1.500 y las 2.250 vueltas y homologa un consumo de 7,9 litros cada 100 km con unas emisiones de CO2 de 208 g/km. El motor intermedio de 136 CV, presenta la misma cifra de consumo, con un par máximo de 340 Nm a 1.600 revoluciones. Pero sin lugar a dudas, el bloque más equilibrado es el 2.0 biturbo de 163 CV, que ofrece mayor potencia, una elevada cifra de par -400 Nm- y el consumo más bajo de toda la gama: 7,2 litros cada 100 km – equivalente a unas emisiones de 195 g/km-. Esta cifra se consigue gracias a la utilización de la función Stop/Start– aunque es opcional.
Esta reducción se traduce también en unos costes operativos un 25% más bajos, no sólo por el descenso del consumo, sino también por la disminución de los costes de mantenimiento. Pero aún hay más, ya que al utilizar motores más ligeros, la carga útil se ha incrementado hasta un 10%.
Un sinfín de variantes de carrocería
La nueva Crafter tendrá una versión para cada necesidad, ya que estará disponible como furgón, con tres distancias entre ejes diferentes, cuatro longitudes y dos alturas de techo; como Kombi para transporte personal; o como pick-up, con doble cabina o con una plataforma base para diversas variantes de carrocería.
Al mismo tiempo, Volkswagen ha mejorado el tratamiento de la carrocería para evitar la corrosión: ahora, todos los puntos con riesgo de oxidación se galvanizan con una o dos capas.
Estará a la venta en julio.
