Se llama LifePaint pero no es una pintura, realmente o al menos no es permanente no cambia el color de las cosas. Sin embargo, para los ciclistas que circulan por la noche será un auténtico «salvavidas» ya que cuando lo rocías convierte en reflectante las superficies sobre las que se ha aplicado de forma inmediata.
La idea de Volvo es sencilla e ingeniosa: coges el spray, rocías al ciclista, bici y todo lo que quieras. No cambia nada a simple vista, pero cuando una luz da sobre las superficies rociadas estas se convierten en reflectantes, imposibles de no ver. Pero esta aplicación es temporal: ni la ropa ni las superficies tratadas alteran su textura o color y pueden ser lavadas. Si no lo haces el efecto durará una semana, aproximadamente.
No puedes comprarlo por ahora; está en pruebas en Londres y Kent donde cualquiera que quiera probarlo puede obtenerlo de forma gratuita. Si tiene el éxito esperado llegará comercialmente primero al resto del Reino Unido y después al resto del mundo.
