La victoria ha sido conseguida en la categoría «especulativa», la cual engloba proyectos que todavía no pasan de propuestas o conceptos y, más que para una implantación inmediata, forman parte de una investigación.
«Window to the World» se sirve de la tecnología de realidad aumentada para convertir las ventanillas del vehículo en una superficie interactiva: Así, estos cristales pueden servir como tablero de dibujo para los más pequeños -realizando los trazos directamente con los dedos y viendo cómo se integran en el paisaje- o como soporte que proporcione información sobre los puntos de interés de los lugares por los que se pase -llegando a ser capaz de traducir carteles en el idioma local-. Incluso el techo panorámico aprovecha esta tecnología para recrear constelaciones con el firmamento auténtico de fondo, y aportar datos para aprender más sobre ellas.
La idea fue desarrollada por la División de Diseño Kansei1, perteneciente a la filial europea de Toyota, en colaboración con el CIID (Instituto de Diseño de Interacción de Copenhague). Su presentación se realizó en junio de 2011, con motivo de la exposición «Nuestra movilidad del futuro hoy», organizada en el Museo Autoworld de Bruselas por la Asociación de Constructores Europeos de Automóviles (ACEA).
