La actualización del Audi A3, incluido el modelo deportivo S, llegará a los concesionarios en el segundo trimestre de 2024. El Audi S3 Prototype ha sido puesto a prueba en las curvas desafiantes y los pronunciados puertos de montaña que forman parte de las carreteras que rodean Salalah, en Omán.
Todavía con su camuflaje exterior, el Audi S3 Prototype eleva la dinámica de conducción a un nuevo nivel, gracias a numerosas innovaciones técnicas, tal y como aseguran desde la marca de los cuatro aros.

Entre sus principales actualizaciones, podemos ver una mayor potencia que le permitirá ser el más potente de su historia. Con 245 kW, lo que se traduce en 333 CV y 420 Nm de par motor, el 2.0 TFSI es más enérgico que nunca, recibiendo un aumento de potencia de 23 CV y 20 Nm adicionales de par. El resultado es una poderosa capacidad de respuesta y una potente aceleración, alzando los 100 km/h en tan solo 4,7 segundos.
El Audi S3 Prototype demuestra una optimización de la puesta a punto del motor
El turbocompresor precargado garantiza una entrega de potencia más espontánea del 2.0 TFSI. A velocidad constante y en aceleración baja o media en el rango de carga parcial, el turbocompresor se mantiene a un régimen constante. Además, la válvula de mariposa, que está abierta durante las fases de plena carga y que se encarga de dosificar la cantidad de aire que entra al motor, mejora sustancialmente el rendimiento.
El S tronic de siete velocidades permite ahora un despegue más espontáneo, gracias a un mayor par de arranque, por lo que la configuración de la transmisión pasa a ser más deportiva. Además, el tiempo de cambio de marcha a plena carga se ha reducido a la mitad y las revoluciones del motor aumentan a carga parcial cuando la transmisión está en modo D.

La agilidad y la estabilidad del Audi S3 Prototype aumenta gracias a la incorporación del torque süplitter, que ya incorporaba el Audi RS 3. Esta tecnología permite una distribución activa y totalmente variable del par entre las ruedas traseras, lo que posibilitará una distribución óptima del par entre la rueda trasera situada en el interior y el exterior de la curva.
Más deportividad en el Audi S3 Prototype
En la parte delantera, para un mayor agarre y agilidad en curvas, se ha instalado un eje McPherson con un nuevo cojinete de pivote que permite una caída negativa de las ruedas de algo menos de 1,5 grados, lo que supone más del doble que en el modelo predecesor. El mencionado cojinete de pivote junto con los trapecios más rígidos hacen que el modelo compacto deportivo sea más hábil.
Asimismo, el nuevo modo dynamic plus del Audi drive select garantiza un dinamismo de conducción excepcionalmente alto. El torque splitter envía el máximo par motor posible al eje trasero y a la rueda trasera situada en el exterior de la curva, lo que provoca una tendencia al sobreviraje.

Y no solo eso, la dirección progresiva tiene la ventaja de una relación variable en función del ángulo de giro del volante: cuanto más gira el conductor, más directa se vuelve. Por lo tanto, el Audi S3 Prototype ha ajustado sus características de dirección, especialmente en la posición central, para una mayor precisión y un mejor manejo general.
No todo es potencia, también se apuesta por la estabilización
Sin embargo, en un deportivo no se debe tener únicamente en cuenta la potencia, aunque esta sea importante, sino que debemos comprobar la estabilidad del coche. En el Audi S3 Prototype existe una mayor dinámica de conducción, lo cual implica una mayor exigencia para los frenos. Por ello, se instalan discos ventilados de mayor tamaño en el eje delantero.

Para una mayor calidad de conducción este compacto introduce unos neumáticos de mayor rendimiento. En concreto serán dos nuevos neumáticos de 19 pulgadas en formato 235/35 los encargados de transmitir la potencia al asfalto: las gomas de altas prestaciones ofrecen un comportamiento optimizado en seco, así como un mejor rendimiento de frenado.
Por último, todos los sistemas de control de la suspensión han sido ajustados de forma específica para conseguir una respuesta dinámica en los giros y una mayor manejabilidad. Además, la diferencia en las fuerzas de propulsión hacen que el vehículo se inscriba en las curvas con mayor facilidad y siga el ángulo de giro de la dirección con más precisión.
