Híbrido enchufable con etiqueta Cero

Prueba del Mini Countryman Cooper SE ALL4

Miguel Tineo
Miguel Tineo
El Mini Countryman Cooper SE ALL4 es un SUV híbrido enchufable de 4,29 metros con etiqueta Cero de la DGT. Lo hemos probado.

El Mini Countryman es un SUV de 4,29 metros de largo con carrocería de cinco puertas. Está creado sobre la plataforma BMW UKL2, la misma que también emplean el BMW X1 y X2 y también el Serie 1 y Serie 2 (a excepción del Serie 2 Coupé).

En la actualidad, existen cuatro versiones del Countryman: Countryman (gasolina de 136 CV con etiqueta C, 36.600 euros), Countryman Cooper S ALL4 (gasolina de 178 CV con etiqueta C, 44.050 euros), Countryman John Cooper Works (gasolina de 306 CV con etiqueta C, 55.100 euros) y Countryman Cooper SE ALL4 (híbrido enchufable de gasolina con 220 CV y etiqueta Cero, 46.000 euros). Cada versión va unida a un solo nivel de acabado.

Por precio, es un coche un poco más caro que SUV’s de su mismo tamaño de marcas generalistas. Por poner un ejemplo, un Peugeot 3008 1.2 PT 130 cuesta desde 33.050 euros, y un 3008 Hybrid 225 (también híbrido enchufable) sale desde 44.600 euros. Eso sí, el Mini apuesta más por el diseño y la imagen, mientras que los generalistas ofrecen más espacio y equipamiento de serie. Un BMW X1 equiparable por mecánica es aún más caro que el Mini. Por ejemplo, un BMW X1 sDrive18i de 136 CV vale 41.700 euros, y un X1 xDrive25e híbrido enchufable se va a los 51.900 euros.

Información del Mini Countryman Cooper SE ALL4

Si nos centramos en la versión SE ALL4, este Mini Countryman es un híbrido enchufable con una autonomía eléctrica homologada de 51 km. Emplea un motor de gasolina de 1.5 litros, tres cilindros y sobrealimentado por un compresor que rinde 125 CV y 220 Nm, y un segundo motor eléctrico de 95 CV y 165 Nm que se ubica en la parte trasera, bajo el piso del maletero. La batería va debajo de los asientos traseros, y tiene una capacidad de 10 kWh.

El consumo medio homologado es de 1,7 L/100 km con unas emisiones de 39 gr/km de CO2. En la práctica, el consumo depende completamente de la utilización que realicemos del sistema eléctrico. El Mini ofrece la posibilidad de utilizarlo de forma completamente eléctrica, algo sólo interesante en ciudad; de forma híbrida, recomendable en la mayoría de situaciones; y en forma de ahorro de batería, interesante cuando sólo vayamos a circular por carretera, en tipo de recorrido donde menos eficiente es el sistema eléctrico.

En la práctica, con una recarga completa, lo normal es moverse en torno a 30-35 kilómetros reales sobre todo si utilizamos en recorridos urbanos. En modo híbrido, el consumo suele situarse en torno a 6,5-7 L/100 km, mientras que si vamos sin nada de carga en la batería, lo normal es situarse en torno a los 7,5 L/100 km, algo relativamente esperable teniendo en cuenta que este coche pesa 1.790 kilos. El depósito de gasolina es de 36 litros.

Cómo es el Mini Countryman Cooper SE ALL4 por dentro

El Mini Countryman se caracteriza por contar con un diseño de salpicadero muy personal y reconocible, pues desde su renacimiento como marca hace ya más de 20 años, en BMW apostaron por seguir las líneas maestras de los Mini originales. Por eso, el Countryman mantiene una gran pantalla central con forma redondeada, un guiño al velocímetro de los Mini originales. También mantiene una segunda pantalla más pequeña por detrás del volante.

Mini Countryman Cooper SE 03

El puesto de conducción es bastante cómodo. Se va sentado un poco más alto que en otros Mini, algo que favorece la accesibilidad y la visibilidad. Hay muchas funciones a manejar en la pantalla central, pero casi todo se maneja a través de un mando giratorio rodeado de botones que hay junto al cambio y facilita mucho la navegación por los diferentes menús. Eso y el empleo de mandos físicos tradicionales para el climatizador o los modos de conducción hacen que no sea demasiado complicado acostumbrase al interior del Mini.

Por calidad, y como ocurre con otros Mini, se emplea bastante plástico duro (algo que cada vez es más habitual en todos los coches)), pero la ausencia de ruidos en marcha o la cuidada iluminación interior, combinada con el tacto de los diferentes mandos, terminan creando un clima bastante agradable y un interior bastante pintón.

Por espacio, el Mini Countryman se defiende mejor de lo previsto si lo comparamos con otros Mini, pero se queda un poquito por detrás de la media de su segmento, sobre todo por la anchura disponible, justa para que tres adultos viajen con holgura. Dos irán bastante bien porque en espacio para las piernas y en altura sí está más cerca de sus principales rivales, y eso que en esta versión la banqueta vi situada tres centímetros más alta que en otros Countryman dado que la batería está ubicada debajo.

Cómo es el maletero del Mini Countryman Cooper SE ALL4

Es el aspecto donde el Mini Countryman se queda un poco más descolgado que otros SUV de tamaño parecido, pues tiene 405 litros de capacidad (450 litros en el caso de los Countryman que no son PHEV). Es un maletero de formas regulares y con un pequeño doble fondo en el que se puede guardar el cable de carga.

Mini Countryman Cooper SE 01

A diferencia de los otros Countryman, y por la presencia de la batería, el Cooper SE es el único Countryman que no puede tener banqueta deslizante, por lo que tampoco se puede incrementar el volumen de la carga adelantando los asientos. Si optamos por abatirlos y quitar la bandeja del maletero, que es dura y no enrollable como en otros SUV’s, la capacidad llega hasta los 1.275 litros.

Cómo va el Mini Countryman Cooper SE ALL4

Lo habitual en el caso de la mayoría de los SUV es que su planteamiento dinámico responda más bien a las necesidades de una familia, que busca comodidad, facilidad de conducción y respuestas nobles y seguras, además de una buena insonorización. En el caso del Mini Countryman, la apuesta es un tanto diferente, pues trata de ofrecer un tacto de conducción más ágil y vivo de reacciones que aporte un plus de deportividad, como sucede en otros Mini.

Y, aunque en cierta medida lo consigue, el Mini Countryman sigue siendo un SUV perfectamente utilizable a diario o para viajar, sin que la comodidad o la facilidad se vean en entredicho.

Así, el Mini Countryman es u coche con una suspensión un tanto más firme que la mayoría de los SUV’s del mercado. ¿Seca? Depende de las llantas que pongamos, si es que decidimos poner en opción alguna de una medida superior a las de 17 pulgadas que lleva este Mini. También las hay de 18 y de 19 pulgadas.

Con las llantas de 17 pulgadas, y como hemos comprobado en otro Countryman, el coche es como mejor va porque, además de ser la opción más cómo da y menos seca, también es la que ofrece unas reacciones más suaves y progresivas cuando el asfalto está bacheado. En el caso de esta prueba, cuya unidad equipaba llantas de 18 pulgadas, ese equilibrio se ve levemente mermado, aunque el resultado es todavía bastante aceptable. Es más, si nos gusta un tacto de conducción, hasta puede ser recomendable. En cambio, con las de 19”, y como hemos visto en otros Countryman, el coche se vuelve innecesariamente seco, incómodo y hasta impreciso por la facilidad con la que las ruedas tienden a despegar del asfalto en curvas de firme irregular.

Independientemente de esto, el Countryman tiene una dirección muy precisa y un eje delantero de reacciones ágiles, lo que le permite cambiar de dirección con rapidez. La suspensión contiene muy bien los movimientos de la carrocería, y eso convierte al Countryman en una de las mejores opciones por agilidad del segmento, y también lo es por viveza de reacciones. Un Volkswagen T-ROC o un Seat Ateca gozan de una agilidad equiparable, pero sus reacciones son mucho más dulces, progresivas y fáciles de controlar. También son notablemente más cómodos aunque, a cambio, no transmiten tanta viveza de reacciones.

Son reacciones vivas, pero… ¿deportivas? No exactamente. Sí lo son por ese tacto de suspensión o por la facilidad con la que cambia de dirección, dos cosas que le hacen parecer más ligero de lo que indican los 1.790 kilos que aparecen en la ficha técnica. Pero no lo son tanto por las reacciones del eje trasero, por ejemplo, mucho más enfocadas a asegurar unas reacciones nobles y que, al límite, no sean exigentes con el conductor. Y, sinceramente, no creemos que el posible comprador de este coche busque más que eso; es más, hasta eso ya me parece demasiado.

¡Ah, sí! Tiene tracción total, pero su funcionamiento no tiene una gran influencia en el comportamiento en curva porque la del eje delantero depende el motor térmico, mientras que las ruedas traseras sólo las mueve el motor eléctrico. De hecho, su influencia en el comportamiento e mayor por el hecho de que recaiga un mayor peso sobre el eje trasero que por la mejora de tracción que puede producir. ¿Para qué sirve entonces esta tracción total? Pues, además de para el funcionamiento de este sistema híbrido, puede ser útil a la hora de avanzar por superficies resbaladizas, como nieve o barro.

En cuanto al aspecto mecánico, el Countryman tiene una respuesta muy buena y, tanto en modo híbrido como en el que emplea sobre todo el motor térmico, es difícil darse cuenta de que estamos conduciendo un coche híbrido. Eso es, en gran medida, por el buen funcionamiento de la caja de cambios automática de seis marchas por convertidor de par que lleva este coche, que en esos casos aprovecha la respuesta de la mecánica como si se tratase simplemente de un motor térmico. Es una de las claves que explican que este Mini vaya tan bien.

En cuanto al conjunto de los dos motores, la respuesta es bastante contundente, y mueve con mucha facilidad las casi 1.8 toneladas que pesa el coche. De hecho, este Mini Countryman Cooper SE ALL4 acelera de 0 a 100 km/h en 6,8 segundos, que es una cifra buena. La única pega que el podemos poner a este conjunto es que este motor 1.5 Turbo es un tanto ruidoso cuando va muy revolucionado.

 

Mini Countryman