Ayer mismo te hablábamos de los primeros coches eléctricos turcos, con el Togg T10X com estandarte (cuya fabricación se realiza íntegramente en el país) y cuyas buenas cifras de ventas que han motivado a la firma a anunciar una expansión internacional para 2025, incluyendo el mercado europeo. En esto de la electromovilidad foránea, es cierto que los chinos han sido los pioneros, pero ahora se les ha sumado un nuevo actor: Rusia. Con una pequeña producción de coches eléctricos que se detuvo hace años, han vuelto a las andadas presentando un nuevo proyecto.
Se llama Avtotor Ember y se trata de un proyecto de coche eléctrico presentado por el Instituto Politécnico de Moscú (Polytech). El mencionado prototipo hace uso de una plataforma modular y es el primer proyecto desde el Zetta, uno de los primeros coches eléctricos rusos, anunciado en 2020 y con una autonomía de unos 200 km.
Avtotor ya tiene experiencia en la fabricación de coches, pues se encargaba de la producción de vehículos europeos para el mercado ruso. En concreto, modelos de BMW, Hyundai o Kia. Sin embargo, la guerra de Ucrania provocó una serie de sanciones internacionales que provocaron que las marcas retiraran las producción de la fábrica de Avtotor.
La producción de coches eléctricos arrancará en 2025
Debido a las consecuencias de la guerra, el Instituto Politécnico de Moscú ha asumido la dirección y gestión de la fábrica de Avtotor, donde se está creando su futuro coche eléctrico. Como indica su director, Vladimir Miklushevsky, estas instalaciones también servirán como «centro de entrenamiento para futuros ingenieros de automoción», y en concreto, de coches eléctricos.
En el tiempo que el Polytech lleva haciéndose cargo de estas instalaciones, ya se han presentado cuatro vehículos eléctricos. Un quad, dos furgonetas y un coche, denominado Avtotor Ember. Aunque no se ha revelado información alguna sobre este último proyecto, prevén que su pre-producción arrancará en 2024. Y no será hasta 2025 cuando se presente oficialmente. Pese a su llamativo diseño, sus creadores indican que la variante de producción será notablemente diferente.
Evidentemente, se trata de una ‘mula de pruebas’, un prototipo donde las formas de la carrocería no importan, pues lo que se está probando realmente es la vertiente mecánica. Tocará esperar para ver cómo se materializa este prototipo cero emisiones y si acaba llegando al mercado europeo de coches eléctricos.
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