El BMW Serie 2, un coche que acaba de recibir una renovación a mitad de su vida comercial, acaba de recibir una versión especial y limitada llamada M240i M Performance Edition. De hecho, su intención es celebrar la llegada del nuevo lavado de cara. Se trata de una variante deportiva que se acerca peligrosamente al todopoderoso BMW M2, la joya de la corona de la gama de este modelo. Además, tan solo se fabricarán 750 unidades, por lo que puede considerarse un vehículo más exclusivo que el propio BMW M2.
Ya al primer vistazo se nota que es un coche al que ha ´metido mano´ la división deportiva de la marca, M. Lo exterioriza perfectamente a través de unas llantas de aleación de 19 pulgadas, un sistema de escape modificado con respecto al modelo de serie -está basado en el BMW 240i- y diversos apliques decorativos realizados en fibra de carbono.
Asimismo, añade un difusor trasero, un pequeño spoiler situado sobre el portón del maletero y varios elementos terminados en negro, como las taloneras o los marcos de las ventanillas laterales -todos ellos disponibles en el catálogo de M Performance-. Estos detalles contrastan con la pintura blanca de su carrocería, llamada Alpine White.
En cuanto a su mecánica, mantiene el mismo bloque gasolina que incorpora de serie el M240i. Es decir, bajo el capó cuenta con un propulsor de 3.0 litros con seis cilindros en línea y la tecnología TwinPower Turbo que entrega una potencia de hasta 340 CV y un par motor máximo de 500 Nm. Con él, este BMW M240i M Performance Edition acelera de 0 a 100 km/h en 4,4 segundos y alcanza una velocidad máxima de 250 km/h -limitada electrónicamente-.