1.200 CV
Bugatti ha dado una vuelta de tuerca al motor 8.0 W16 quad-turbo para conseguir unos asombrosos 1.200 CV y un par de 1.500 Nm, algo que se ha conseguido con cuatro turbos de mayor tamaño y cuatro intercooler más grandes. Aunque la marca no se pronuncia sobre aceleración, parece que el 0 a 100 km/h se mantendrá en torno a 2,5 segundos, aunque algunas fuentes afirman que el 0 a 300 km/h bajaría a sólo 15 segundos. Para domar tanta potencia, el Super Sport requiere de una mayor fuente de refrigeración y de mejoras en las suspensiones y el chasis. Para conseguir lo primero se han habilitado dos grandes conductos en el frontal, mientras que el tren de rodaje y la amortiguación han sido mejorados para conseguir más confort y mejor paso por curva -a eso ayuda también una reducción del peso de 50 kg, según indican algunos medios-.
A base de fibra de carbono
Si lo miramos por fuera, apenas encontramos cambios en el frontal, si bien destacan las dos grandes tomas de aire dobles de las que hablamos anteriormente. Quizá lo más llamativo sea la nueva cubierta del motor, que lo mantiene oculto, mejora la aerodinámica y aumenta el flujo de aire hacia el vano motor. También introduce un splitter en la parte baja del paragolpes, un nuevo escape doble -en lugar del gran tubo central- y algunos retoques estéticos en la parte trasera. La carrocería, entera de fibra de carbono, se deja ver sin ningún tipo de pintura a excepción del acabado naranja de los bajos, aunque este diseño sólo se utilizará para las cinco primeras unidades (por cierto, ya están vendidas). Para el resto se ofrecerá como opción.
El coche más rápido del mundo
Con tanta potencia bajo el capó, los responsables de la marca tenían un objetivo claro: homologar la mayor velocidad máxima de un coche de producción. Para lograrlo se trasladaron al circuito de pruebas de Volkswagen en Ehra-Lessien, cuya recta de nueve kilómetros debería servir para alcanzar los 425 km/h que preveían sus responsables. El TÜV y un equipo de Libro Guinness de los Récords serían los testigos de la hazaña: el piloto oficial, Pierre Henri Raphanel, conseguiría en la ida una velocidad máxima de 427,933 km/h, mientras que en la vuelta subiría el registro hasta los 434,211 km/h. Para la homologación oficial -lo que veremos en la ficha técnica-, el TÜV utiliza una media de ambas velocidades, así que en nuestra guía de precios veréis unos increíbles 431 km/h, 6 km/h más que las previsiones más optimistas de Bugatti.
La presentación oficial del nuevo coche más rápido del mundo tendrá lugar en agosto en el concurso de elegancia de Pebble Beach, así que aún queda un poco de tiempo para ahorrar los dos millones de euros que costará la nueva creación de la marca francesa.
