En muchas ocasiones el desconocimiento de cómo se debe conducir es el causante de las imprudencias y los errores al volante. Uno de los lugares que más discrepancias crea entre los conductores son las rotondas, culpables del 20% de accidentes y el 10% de las muertes que se producen en intersecciones de cualquier tipo. Según Formaster, Asociación Profesional de Empresas Formadoras en Seguridad Vial, es común desconocer cada uno de los carriles y posicionarse incorrectamente en ellos cometiendo varias imprudencias que pueden conllevar accidentes muy graves.
No ceder el paso al incorporarnos es posiblemente el error menos común y la norma que casi todos los conductores cumplen, pero al conducir por una glorieta se cometen muchos fallos que en algunos casos pueden provocar accidentes y riesgos en la conducción. Desconocer el uso de los carriles, conducir por el lado equivocado, no usar o usar de forma inapropiada el intermitente o abandonar una rotonda desde el carril interior son algunos de los fallos más comunes. Sin embargo, el error que más accidentes graves provoca y que conlleva más fallecidos es el de circular recto en una rotonda, cruzando los carriles. El 15% de los conductores comete esta imprudencia que normalmente va unida a una velocidad alta e inadecuada para estas intersecciones y a no realizar el correcto ceda el paso a los vehículos que están en la plaza giratoria.
En definitiva, el 80% de los conductores comete errores al circular por rotondas, una cifra muy elevada y de la que Foremaster quiere crear conciencia para reducir la siniestralidad en este tipo de intersecciones.
Pautas de comportamiento en una rotonda
- La preferencia en una rotonda es siempre de los vehículos que están dentro de ella.
- Nunca tomes una salida de la rotonda desde el carril interior.
- La incorporación a la rotonda debe realizarse siempre en el carril de la derecha.
- Nunca deben cruzarse carriles.
- Situarnos siempre correctamente para nuestra salida.
- Utilizar el intermitente de forma correcta.
- Dejar más espacio para maniobrar a los vehículos más grandes y pesados.
