La Carrera Panamericana , o Mexican Road Race, es un rally mexicano anual de 3.600 km que se extiende de sur a norte desde Huatulco hasta Nuevo Laredo – México-. Según uno de sus participantes, es una combinación del Gran Premio de Tripoli, la «Mille Miglia» italiana, el alemán «Nurburgring» y las 24 Horas de Le-Mans. En sus comienzos fue el escaparate de moda en el cual muchas marcas europeas querían exhibirse. De hecho, en 1952 se creó la división entre categorías Sport y Turismo debido a que los coches de los participantes, en su mayoría americanos como Packard o Lincoln, estaban en inferioridad de condiciones frente a marcas como Ferrari o Mercedes.
De igual modo, los vehículos se distribuyen en varias categorías según el año en el que fueron fabricados. Modelos de automóviles fabricados entre 1940 y 1954 para las categorías de Turismo y Sport, modelos construidos de 1950 a 1954 para la categoría Original Panam (años en los que se celebraron las cinco ediciones de la Época Antigua de la carrera) y modelos de 1940 a 1965 para la categoría Histórica. El reglamento de la carrera admite coches de producción construidos de 1990 a 2006, agrupándolos en una categoría ilimitada llamada Grupo de automóviles de Exhibición.
¿Qué hace a la Panamericana ser tan dura? Además de la lógica dificultad de competir con coches clásicos, el clima es un factor decisivo en esta carrera. El recorrido comienza en un clima tropical donde la temperatura y la humedad son elevadas para continuar por una carretera paralela al mar y seguir por ella hasta la mareante altura de 3.000 metros. La temperatura varía desde 34 grados hasta menos de 0 en tan solo en 72 horas. Obviamente, esto supone una auténtica tortura para los motores de los participantes, cuyos reglajes deben variarse constantemente en función del ambiente.
Este año el sueco ex campeón de rallies Stig Blomqvist se ha subido a lo más alto del podio de la Panamericana en un Studebaker. Es su premio después de ser el más regular en 3.600 km, 7 etapas y 13 provincias de México. Otro Studebaker más y otro sueco, Lars Stugemo, quedó en segunda posición. Los locales Alejandro y Mauricio Pimentel finalizaron en tercera posición con su Dodge.
En palabras de Alejandro Pimentel: «Estoy feliz, es algo por lo que luchamos desde hace un buen tiempo y que ahora se está cristalizando. Obviamente queríamos ganar, pero este podio es muy bueno para mí y para todo el equipo Farmacias GI-Pimentel ProRally. Es nuestra primera participación y nos vamos muy satisfechos, me ganó una leyenda del ralismo como Stig Blomqvist a quien felicito por este triunfo. El año próximo llega rápido, ya tendremos tiempo para analizar lo que fue la carrera»
Una etapa muy veloz, hoy llegamos a alcanzar una velocidad de 250 km/h y únicamente algún problema importante en los pilotos de punta nos permitiría escalar un lugar más arriba del podio. Es algo que soñábamos desde hace algún tiempo y ahora se cristalizó, un momento fantástico, gracias a todos los que nos ayudaron a hacer esto posible, a los muchachos del taller Roberto, Chucho, Rafa, Josu, Cristopher, Juan Pablo, Edgar, Gracias por siempre trabajar duro para que el auto fuera competitivo siempre», añadió.