Mercedes-Benz ha sido pionera en muchos aspectos del automóvil. Por ejemplo, fueron los primeros en incorporar tanto el ABS como el ESP de serie en uno de sus modelos (en 1978 y en 1995, respectivamente) y, ahora, lo volverán a ser.
En esta ocasión lo harán porque algunos de sus modelos, en concreto el Mercedes-Benz EQS y Mercedes-Benz Clase S; equiparán a partir de 2024 faros de color azul turquesa en dos estados de EE.UU.: California y Nevada. Y lo harán por un motivo muy concreto.

Ambos estados le han otorgado permiso para equipar estos faros azul turquesa ya que, cuando estos estén encendidos, significará que ambos modelos estarán funcionado en el modo de conducción autónoma, esto es, con el sistema DRIVE PILOT de la marca, el único sistema de conducción autónoma de nivel 3 aprobado para su uso en autopista en estos estados y que, en Alemania, ya está aprobado por las autoridades de tráfico desde 2022).
De esta forma, los faros azul turquesa sustituirán a las habituales luces de posición de color naranja (habituales en los EE.UU.) y también estarán presentes en los faros delanteros, en banda lumínica de los retrovisores y en la esquina inferior de los pilotos traseros.
Lo más interesante es que estos faros se activarán automáticamente cuando el coche esté funcionado bajo el modo DRIVE PILOT, que si ya avisaba al conductor de que entraba en funcionamiento mediante dos testigos de ese color, ahora lo hará también al resto de usuarios de la vía, algo especialmente importante para los viandantes y, sobre todo, de lo más útil para los agentes de la Ley, que ya sabrán, de un solo vistazo que el coche funciona en conducción autónoma y que, por eso, los conductores pueden viajar legalmente realizando otras actividades con las manos.

“Con el desarrollo de las luces de posición de conducción automatizadas, Mercedes-Benz vuelve a establecer nuevos estándares en la industria. […] Cuantos más vehículos automatizados pueblan las carreteras, más importante se vuelve la comunicación y la interacción entre el vehículo y el medio ambiente”, afirma Markus Schäfer, director de Tecnología, Desarrollo y Compras del Grupo Mercedes-Benz.
Azul turquesa: Mercedes-Benz quiere convertirlo en estándar de la conducción autónoma
El uso inicial del azul turquesa no es aleatorio. No en vano, en las reglamentación del SAE, la sociedad de ingenieros de automoción que estableció la clasificación de los distintos niveles de la conducción autónoma, ya se recomienda el uso de este tono. Pero es que, además, este tono es “altamente visible y se detecta fácilmente por los otros usuarios de la vía”; por último, dado lo poco visto que está en relación a la señalización de tráfico, la posibilidad de que se confunda con el resto de señales o alertas “es muy baja”, tal y como defiende Mercedes.

Así las cosas, y dado que no existe un marco general en EE.UU., China o Europa para el uso de luces azul turquesa en los vehículos de producción, Mercedes-Benz quiere estandarizar este tono “como medio para visualizar el estado de conducción automatizada, fomentando la comprensión y aceptación global de esta tecnología”. Y, para este lograr este objetivo, la decisión de Nevada y California puede haber creado un primer e importantísimo punto de inflexión.
