Además de sus modelos de calle -como el Mangusta, el Pantera, el Guarà…-, de Tomaso hizo sus incursiones en competición, incluyendo una en Fórmula 1 en 1970, cuando proporcionó a Frank Williams en sus comienzos un chasis cliente.
A finales de los 80, Alejandro de Tomaso comienza a vender partes de su compañía. En 1993 sufre un infarto -fallecería en 2003-, y su hijo Santiago toma los mandos. En 2004, cuando la actividad de De Tomaso se había reducido a realizar todo terrenos con la firma rusa Uaz, la viuda de De Tomaso, Isabel Haskell, declara la suspensión de pagos. Un ex consejero delegado de Telecom Italia, Gian Mario Rossignolo, acabó comprando la marca. La última creación de De Tomaso fue el todo terreno Deauville, presentado en el Salón de Ginebra 2011. Los derechos de fabricación han sido vendidos a una compañía china.