Para poder presentarse, los candidatos tienen que conseguir suficientes nominaciones de los clubes de automovilistas y federaciones miembros de la FIA, en un proceso semejante a una recogida de avales. Ward ya se ha puesto manos a la obra.
En cuanto a Todt, éste afirmaba al principio de su mandato que sólo quería permanecer en el puesto durante una legislatura, pero todo el mundo da por hecho que aspirará a la reelección y es el favorito. David Ward explica que se presenta simplemente para que haya debate sobre la marcha de la FIA, y desde luego hay muchas cosas sobre las que debatir… desde la insistencia de Todt y su vicepresidente, el español Carlos Gracia, en la celebración del Gran Premio de Bahréin a pesar de la represión en el país, hasta los obstáculos para firmar un nuevo Pacto de la Concordia con los equipos de Fórmula 1 y Bernie Ecclestone. Las formas de recaudar dinero de los competidores también han dado que hablar mientras Todt ha estado en el cargo.
Ward ha anunciado que deja de forma inmediata la dirección de la Fundación FIA para eliminar toda sombra de incompatibilidad, aunque no haya ninguna norma que le exija hacerlo. La Fundación FIA se dedica a la promoción de iniciativas para mejorar la seguridad en carretera y el respeto del automóvil al medio ambiente. Desde ella, Ward participó en la creación del organismo Global NCAP y en las campañas por emplazar a los fabricantes a buscar consumos más bajos de combustible. Fuera del mundo del automóvil, fue asesor del ex-primer ministro británico laborista John Smith.
