¿Estás en el fichero de los «estafadores» al seguro?

Desde 2008, el número de personas que han intentado engañar al seguro para cobrar una indemnización ha crecido un 30%. Para evitar muchos engaños las compañías de seguros acaban de poner en funcionamiento un megaregistro de los coches ya dados de baja -por haber sufrido un accidente grave, haberse quemado…- y por los que ya […]


Desde 2008, el número de personas que han intentado engañar al seguro para cobrar una indemnización ha crecido un 30%. Para evitar muchos engaños las compañías de seguros acaban de poner en funcionamiento un megaregistro de los coches ya dados de baja -por haber sufrido un accidente grave, haberse quemado…- y por los que ya han pagado su valor de mercado a sus propietarios. ¿El objetivo? Que, con la documentación del coche en su poder, no los vuelvan a asegurar en otra compañía… y reclamen que les vuelvan a indemnizar por haber quedado destrozado.

Detectives de las aseguradoras, un trabajo que ahorra millones

Y es que la lucha contra el fraude las aseguradoras mueve cada año decenas de millones de euros en detectives, investigaciones, peritos… para evitar pagar de mas y, sobre todo, detectar a los pícaros que quieren -vivir- a costa de las indemnizaciones. De hecho, sólo en 2013, las compañías calculan que, gracias a la detección de los engaños, se han ahorrado pérdidas por 233 millones de euros… o lo que es lo mismo, un 61,9 % en indemnizaciones por daños a los automóviles.

Fruto de los estudios que realizan cada año, las compañías de seguros han descubierto que el perfil del defraudador ha cambiado: Ya no es el estafador empedernido que se sabía todos los trucos, sino personas que necesitan el dinero en un momento en el que no se da crédito y sufren para llegar a fin de mes.

Tanto es así que, aunque el número de casos de fraudes detectados en el sector del automóvil aumentó en 2011 –95.312 por los 89.248 de 2010-, su proporción con respecto al resto de tipos de seguros ha descendido del 75,3 al 72,8 %, lo que demuestra que los defraudadores aprovechan cualquier póliza -hogar, vida, accidentes…- para estafar, no sólo en las de automóviles.

De cualquier forma, en el caso de los seguros de coches, la cantidad media defraudada fue de 2.400 –, según los datos de la Investigación Cooperativa entre Entidades Aseguradoras (ICEA).

Lo último de las aseguradoras para «cazar» a los estafadores…

La última idea ha sido la creación del Fichero de Automóviles de Pérdida Total, Robo e Incendios. Su titular es UNESPA, la Asociación Empresarial del Seguro, y a día de hoy se han inscrito en él el 75 % de las aseguradoras españolas.

El sistema consiste en que las aseguradoras inscritas registran en la base de datos a los conductores a los que han indemnizado por la pérdida total de su vehículo -es decir, aquellos que reciben indemnización porque repararlo es más caro que declararlo siniestro total, tras sufrir un accidente -. Así, si alguien se presenta en otra compañía intentando asegurar un vehículo ya indemnizado -por pérdida total-, la aseguradora, ante la mínima sospecha de fraude, puede consultar si el automóvil en cuestión aparece en el registro, y decidir no aceptarlo. Aunque el Fichero de Automóviles de Pérdida Total, Robo e Incendios no está totalmente operativo, UNESPA espera que funcione a pleno rendimiento a principios de 2013, cuando ya se hayan cargado suficientes datos en él.

Concurso en busca del mayor estafador

Pero tal es la picaresca en el mundo de los seguros que ICEA (Investigación Cooperativa entre Entidades Aseguradoras) organiza, cada año, un simpático concurso entre todas las compañías, que compiten por llevarse el primer premio presentando los casos de fraude más insólitos que han detectado.

En 2011, la ganadora ha sido Pelayo, con el caso de una trama de abogados, clínicas, talleres, etc, que presentaban reclamaciones de siniestros en distintos juzgados siempre con los mismos datos: La misma lesión -celvicalgia-, los mismos talleres, las mismas situaciones… La estafa afectó a un total de 15 aseguradoras y habían presentado más de cien reclamaciones por siniestros en distintos juzgados de la misma zona, reclamando el pago de sumas astronómicas.

El segundo premio se lo llevó Reale, con una falsa declaración de siniestro total de un coche para la que perito y asegurado ¡se habían puesto de acuerdo!. La compañía se dio cuenta de que era falso que el coche hubiese sufrido un accidente porque el siniestro se notifica sólo un mes después de contratarse la póliza… y el coche presenta una oxidación exagerada en los elementos dañados, lo que no se correspondía con las fotos del coche reluciente que el asegurado había presentado al formalizar el contrato del seguro.

El caso más raro… y divertido

Pero tal vez el más divertido sea el tercer premio, entregado a Mapfre. Además de que se descubrió que la póliza se había contratado después del siniestro, el asegurado contaba en su relato que el vehículo había sufrido una «combustión con llama». El uso de un término tan técnico, cuando podría haber dicho sencillamente que su coche se había quemado, alertó a la aseguradora. Parecía que el sujeto se había estudiado previamente su póliza… Además, no había parte de los bomberos y se descubrió un avispero seco junto al tapón de la gasolina, lo que indicaba que en realidad el coche llevaba parado mucho tiempo…

Los casos más sonados de engaño al seguro en España

Los casos presentados en otras ediciones del concurso tampoco tienen desperdicio. Está la historia del conductor que atropelló a una persona a la que se indemnizó con 4.800 -. Estos sujetos descubrieron un filón para ganar dinero y llegaron a simular hasta siete veces el atropello con distintas compañías. En total se repartieron 28.200 –, pero cuando los atraparon fueron condenados a cuatro años de prisión. En 2004, otro asegurado intentó hacer pasar su accidente mientras corría en un rallye como un accidente de circulación, reclamando 6.000 – a su compañía.

Scroll al inicio