Por tanto, la gran inversión realizada por la marca china en investigación y en el desarrollo de tecnologías propias empieza a retornar, posicionándose como un referente a la hora del cuidado del medio ambiente. La trascendencia actual de los vehículos eléctricos fue vislumbrada en el pasado por BYD, hecho que le ha permitido adelantarse a grupos automovilísticos más fuertes gracias a su visión de negocio y el vacío de poder existente en el momento.
El punto de inflexión fue el año 2008, cuando puso a la venta el primer vehículo híbrido enchufable en China, el F3DM. Con la siguiente generación llegó el Qin en 2013, que se ha consolidado como líder de los coches eléctricos y confirma a BYD como marca global a tener en cuenta. Mucho que ver tuvo el proyecto «China Go Global», el cual ayudaba a empresas chinas con sus inversiones en el extranjero, haciendo que BYD llegase a más de 35 países en los 5 continentes.
El Salón del Automóvil de Shanghai de 2015 estableció un hito sin precedentes: fue la primera vez que una marca exponía en un salón una gama compuesta únicamente por vehículos híbridos o eléctricos. Así, BYD tiene una ambiciosa estrategia llamada «7+4», que comprende todas las formas de transporte.
El 7 representa vehículos convencionales –autobús, autocar, taxi, coche, camión logístico, camión de la basura y elementos como hormigoneras eléctricas-, mientras que el 4 hace lo propio con productos específicos para sectores relacionados –almacén, minería, puertos y aeropuertos-.
Ranking | Fabricante | Unidades Junio 2015 |
1 | BYD | 5.037 |
2 | Tesla | 4.994 |
3 | Nissan | 4.955 |
4 | Renault | 3.396 |
5 | Volkswagen | 3.175 |
6 | Mitsubishi | 2.573 |
7 | BMW | 1.991 |
8 | Zotye | 1.990 |
9 | Ford | 1.666 |
10 | Chevrolet | 1.627 |