La tecnología es cada vez mayor e los nuevos vehículos que se fabrican y algunos de estos sistemas, sobre todo en lo relacionado con ayudas a la conducción, se han convertido en el blanco perfecto para los hackers. Ante esta amenaza, el grupo FCA, compuesto por Fiat y Chrysler ha decidido ofrecer recompensas a aquellos piratas informáticos que detecten fallos de seguridad en sus vehículos y, además, se lo notifiquen.
Aunque la medida puede parece un arma de doble filo, lo cierto es que FCA está aplicando a la perfección lo de «sino puedes con tu enemigo, únete a él», De esta forma, el fabricante italiano pretende utilizar a los hackers del mundo para reforzar la ciberseguridad de sus vehículos y diferenciarse de la competencia. Aquellos hackers que ayuden a Fiat-Chrysler recibirán recompensas de entre 100 y 10.000 dólares.
Para llevar a cabo este programa de recompensas, FCA ha decido recurrir a la empresa Bugcrowd, con sede en San Francisco y especializada en este modelo de negocio, retribuyendo a los piratas informáticos que deseen trabajar con empresas u otro tipo de organizaciones para descubrir fallos. Tesla, por ejemplo, también trabaja con ellos en la misma línea que quiere hacerlo el grupo FCA.