El ´afeitado´ o disminución de los kilómetros recorridos por un vehículo usado es un delito muy serio, es por ello que la denuncia en contra de la marca italiana Ferrari nos ha pillado por sorpresa. El autor de la misma ha sido Robert Bud Root, un antiguo trabajador de la firma en Estados Unidos, quien ha acusado a Ferrari de manipular el kilometraje de sus coches de ocasión para aumentar así su valor de cara a una futura venta.
Lo cierto es que Root afirma que desde la propia sede de Maranello -Italia- estarían al tanto de estas prácticas fraudulentas, las cuales se realizarían a través de DEIS Tester, un sistema de diagnosis para cuya utilización se necesita la aprobación de la propia marca. De hecho, según Root, Ferrari elaboró en el año 2010 un manual en el que se detallaba cómo llevar a cabo esta operación de manera exitosa. Además, en 2015, la firma transalpina habría impartido un curso presencial en Italia para instruir a sus empleados.
Este ingeniero químico de 71 años de edad, que trabajaba desde 2009 en la concesión que Ferrari posee en Palm Beach -Florida, Estados Unidos-, ha afirmado también que incluso un multimillonario pagó a su concesionario varios miles de dólares para eliminar un buen puñado de kilómetros de su odómetro, lo que le valió para incrementar el valor de su coche en aproximadamente un millón de dólares.
Root fue despedido por el concesionario en enero de 2016, cuando se negó a realizar ´afeitados´ de kilómetros; además, alega que ha habido una discriminación por su edad. No obstante, para evitar represalias, volvió a ser contratado pasados dos meses, pero cuenta que le están haciendo ´la vida imposible´. De momento, Ferrari ha evitado pronunciarse al respecto, aunque el abogado de dicho concesionario ha dicho que se defenderán en los tribunales de estas acusaciones.
