Hace tan solo una semana, la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil en Galicia llevó a cabo una nueva campaña de control de drogas y alcohol en las carreteras gallegas. Se realizaron un total de 285 controles de drogas, de los que un total de 132 dieron positivo. Este dato supone un crecimiento de los positivos hasta casi 10 puntos por encima de los registrados el mismo mes del año pasado.
A Coruña es la provincia gallega con la tasa más elevada; casi un 60% de los conductores a los que les realizaron la prueba habían consumido alguna sustancia estupefaciente. Le siguien Ourense, con una tasa de positivos del 50% y Pontevedra con el 43%. Cerrando la clasificación está Lugo con una tasa del 33,3% y 19 sanciones.
Con respecto al consumo de alcohol al volante, los agentes de tráfico realizaron un total de 14.000 pruebas de control y los resultados tampoco fueron buenos. Un total de 205 conductores iban bajo los efectos, siendo Ourense la provincia con gallega con el índice de consumo más elevado. En el polo opuesto están Lugo y Pontevedra.
En el computo global, un total de 337 conductores sorprendidos en las carreteras gallegas en tan solo una semana bajo los efectos del alcohol o las drogas, lo que supone una media de 50 cada día. Los datos de la campaña de Tráfico de este mes de junio revelan que lejos de reducirse los positivos por alcohol y drogas, van en aumento. Ya en 2014, Galicia se colocó en las estadísticas de la DGT como la segunda comunidad con más positivos en los controles de alcoholemia, solo por detrás de Andalucía.
