Uno de los modelos más europeos de la marca coreana (está diseñado y fabricado en Europa al igual que la anterior generación) ahora sí viene con fuerza suficiente para rivalizar de manera directa con los superventas ya no sólo por comportamiento, equipamiento y espacio interior sino por diseño aunque este ultimo a costa de guardar cierto parecido con alguno de ellos.
Hyundai i30 2017: exterior e interior
En el exterior, el Hyundai i30 ha crecido hasta los 4,34 metros -4 cm más de largo y 1 cm más de ancho- algo que se deja notar en su interior, que resulta más amplio sobre todo en la anchura y la altura de las plazas traseras. Eso sí, el hueco para las piernas no destaca por espacio y es superado por muchos de sus rivales. La capacidad de carga de su maletero aumenta en 17 litros alcanzado los 395 litros. Dispone de doble fondo y sus acabados son buenos.
El interior destaca por su buena ergonomia. Todos los mandos principales (como el de los elevalunas eléctricos) se encuentran a mano y ofrecen buen tacto al ser accionados. El salpicadero dispone en su zona superior un plástico blando y agradable al tacto. En la parte baja el plástico es duro pero esta bien ajustado y no presenta zonas cortantes. Además repartidos por todo su interior encontramos guanteras de buen tamaño para depositar diferentes objetos.
Así es su gama
Las mecánicas disponibles para el nuevo i30 resultan bastante interesantes por prestaciones y consumo. Estrena una nueva motorización de gasolina 1.4 T-GDi de 140 CV –que se irá incorporando poco a poco al resto de modelos de Hyundai-. A parte de este motor, tenemos una opción más básica en gasolina. Se trata del ya conocido 1.0 T-GDi de tres cilindros y 120 CV. La oferta diésel consta de un 1.6 CRDi con tres potencias -95, 110 y 136 CV-.
Las motorizaciones 1.4 T-GDi de 140 CV gasolina y 1.6 CRDi de 136 CV diésel pueden montar por 1.675 euros una caja de cambios automática de doble embrague de siete velocidades.
En cuanto a los acabados tenemos disponibles tres denominados Klass, Tecno y Style.
En marcha
El Hyundai i30 estrena nueva plataforma. Gracias al empleo de nuevos aceros y a un sistema de unión en algunas partes con adhesivo, resulta 28 kilos mas ligera siendo a su vez un 53% mas rígida.
Esto se deja notar en un coche que se muestra ágil en curva aunque con una suspensión con un tarado tirando a cómodo. En carretera demuestra una gran calidad de rodadura donde la suspensión una vez más destaca por su manera de absorber las irregularidades de la carretera. Además Hyundai ha hecho un buen trabajo de aislamiento del habitáculo. La dirección es lo que menos nos ha gustado ya que se muestra poco comunicativa resultando en ciertos momentos muy artificial.
En cuanto al nuevo motor 1.4 T-GDi de 140 CV resulta muy agradable por su bajo nivel sonoro y su agradable respuesta desde bajas vueltas ya que entrega 242 Nm desde tan solo 1.500 rpm. Es un motor que sube de vueltas con mucha facilidad y que se siente lleno en cualquier régimen de marcha. Es sencillo realizar consumos medios reales de unos 7,2 litros/100 km alcanzando los 210 km/h de velocidad máxima y acelerando de 0 a 100 km/h en 8,9 segundos.