La movilidad en las grandes ciudades está viviendo un proceso de transformación en el que las compañías de alquiler de coches con conductor están adquiriendo un papel protagonista. Aunque al hablar de este tema los nombres propios que se nos vienen a la mente son los de compañías como Uber o Cabify, también existen otras empresas que quieren posicionarse como duros competidores. Es el caso de Lyft que, además y tras una inversión de 25 millones de dólares, contará a partir de ahora con el apoyo de Jaguar Land Rover.
Como hemos comentado, Lyft es una compañía de transporte privado con chófer aunque algo diferente a Uber o Cabify. A simple vista, los coches de Lyft se distinguen por llevar un enorme bigote rosa en el frontal y en lo que se refiere al tipo de servicio, Lyft busca un trato más cercano y amigable con el cliente. De hecho, mientras que en Uber los conductores son profesionales, los conductores de Lyft son particulares que utilizan sus coches para ganar un dinero extra. Además, aunque todas las gestiones se realizan desde la propia aplicación, Lyft permite propinas a los conductores y, por el momento, no cobra ninguna comisión por el servicio.
Con su inversión económica, Jaguar Land Rover pretende ayudar a Lyft en sus planes de expansión y mejora tecnológica. Además, gracias al acuerdo, InMotion Ventures, la empresa de servicios de movilidad de Jaguar Land Rover, tendrá la oportunidad de testear y ayudar al desarrollo de los vehículos autónomos. Por su parte, los conductores de Lyft dispondrán de vehículos de la marca para realizar sus servicios.
Cabe recordar que Jaguar Land Rover es el segundo gran fabricante de la industria del automóvil que entra a formar parte del accionariado de Lyft, ya que en enero de 2016, General Motors invirtió en la empresa 500 millones de dólares. «Prevemos un futuro donde la movilidad colaborativa transforme las ciudades y mejore la vida de las personas. Esta asociación nos ayudará a alcanzar esta meta tan ambiciosa», explica John Zimmer, presidente y cofundador de Lyft.
