El nuevo objetivo comercial de Jeep es llegar de aquí a 2015 al millón de unidades vendidas en todo el mundo. ¿Cómo? Con productos que le permitan expandirse y así acercarse a un mayor número de clientes. Clientes que buscan refinamiento por encima de practicidad. Por ello, el nuevo Cherokee es el elegido para dar ese giro a su pensamiento.
Así, el modelo cambia su concepto 4×4 por el de SUV. De esta forma se abre un amplio abanico de posibilidades? aunque también se las tendrá que ver con grandes superventas como los actuales Audi Q5 o BMW X3. Sí, porque el nuevo Cherokee se aleja ligeramente del campo para acercarse algo más al asfalto. Algo que se percibe desde el primer momento en el que uno se sube al coche.
Más lujo interior
El habitáculo cambia por completo. La consola central y el salpicadero rezuman calidad a la par de vistosidad aunque es cierto que se cuela algún que otro plástico duro que empobrece el aspecto general. Sin embargo, nos tiene ganados de un primer vistazo. El puesto de conducción es realmente cómodo y los asientos son bastante mullidos. La postura es quizá algo elevada dejando el volante algo más bajo de lo normal? pero a su favor hay que decir que nos da sensación de dominio. Los mandos se sitúan al alcance de nuestra mano y su tacto es bastante bueno.
Todo ello mejora con un equipamiento muy completo, a la orden del día, con climatizador dual, pantalla central táctil que puede ser de hasta 8,4 pulgadas –de serie es de 5″-, conexiones USB y AUX en la consola central, navegador, volante de cuero multifucnión, cuadro de relojes digital –con pantalla de 7″- al que se añaden otros sistemas de seguridad como el detector de ángulo muerto, el aviso por cambio involuntario de carril o el asistente de aparcamiento, entre otros.
Nueva plataforma y motores
Este Cherokee está construido sobre una nueva plataforma que le hace crecer hasta los 4,6 metros de largo aunque sigue siendo un coche bastante pesado ya que no baja de los 1.800 kg. Además estrena una gama de motores de origen 100% Fiat.
En el apartado diesel, que será el más demandado para este modelo, se encuentra el 2.0 Multijet II que podrá entregar 140 ó 170 CV. Pero además habrá una versión tope de gama que corresponderá con el gasolina 3.2 V6 –de origen Chrysler- que desarrolla 271 CV. Este únicamente se asociará a la variante Trailhawk que no solo se distingue por una apariencia exterior mucho más campera, con paragolpes específicos o pasos de rueda offroad, sino que posee una mayor altura libre al suelo -22,4 cm- y solo se ofrece con tracción 4×4.
No obstante, la principal novedad de este Cherokee es la introducción, por primera vez en su segmento, de una caja de cambios automática de nueve velocidades. Estará disponible tanto para el 170 CV como para el 271 CV mientras que el diesel de 140 CV sólo podrá hacerlo a una manual de seis marchas.
Dicho motor fue, precisamente, la que pudimos probar, eso sí, únicamente por carretera. Un propulsor perezoso a bajas vueltas pero que se muestra bastante progresivo a partir de las 2.000 rpm. Además, gracias al buen nivel de insonorización del habitáculo, su ruido, que se deja notar bastante cuando estás fuera, no se filtra para nada en el interior. El cambio manual es preciso y rápido y el consumo se mantiene en unos excelentes 6,0 litros –el dato oficial es de 5,3 l/100 km-. Al ser la unidad de acceso la potencia se trasmite únicamente a las ruedas delanteras, otro elemento que hará captar un mayor número de clientes.
No obstante, para aquellos puristas, también estará disponible la tracción 4×4 que, además, se dividirá en tres tipos de sistemas: Active Drive I, que transmite el par motor a las ruedas del eje delantero y, en función de las condiciones de adherencia, puede desviar parte a las traseras, el Active Drive II, que añade el control descenso y a reductora y el Active Drive Lock –sólo para el Traolhawk-, que hace lo propio con el bloqueo del diferencial trasero y el Selec-Speed, un control de velocidad para las condiciones difíciles. Además incluye de serie el sistema Select-Terrain con el que se modifica el funcionamiento del control de tracción a través de cinco modos: Auto, Snow –nieve-, Sport, Sand/Mud -arena/barro- y Rock –roca, en el que se activa automáticamente el bloqueo del diferencial trasero-.
La gama del Cherokee está ya disponible con el siguiente rango de precios:
Cherokee 3.2 Trailhawk 4×4 271 CV Active Drive Lock | 50.300 euros |
Cherokee 3.2 Limited 4×4 271 CV Active Drive | 51.900 euros |
Cherokee 2.0 Diesel Longitude 4×2 140 CV Active Drive | 33.750 euros |
Cherokee 2.0 Diesel Limited 4×2 140 CV Active Drive | 38.800 euros |
Cherokee 2.0 Diesel Longitude 4×4 140 CV Active Drive I | 36.350 euros |
Cherokee 2.0 Diesel Limited 4×4 140 CV Active Drive I | 41.350 euros |
Cherokee 2.0 Diesel Longitude 4×4 170 CV Active Drive I | 39.221 euros |
Cherokee 2.0 Diesel Limited 4×4 170 CV Active Drive I | 44.135 euros |
Cherokee 2.0 Diesel Limited 4×4 170 CV Active Drive II | 45.909 euros |