Desde el 21 de enero, sacarse el carnet de conducir es más difícil que nunca. Por un lado, la DGT ha ido implementando progresivamente -desde el pasado mes de octubre- un nuevo examen teórico que, en vez de tomar como base 800 preguntas, se diseña a partir de un total de 15.500 cuestiones. Los nuevos exámenes ya se utilizan en toda España y, según el presidente de CNAE -la patronal de las autoescuelas-, José Miguel Baéz, son «una buena medida porque antes la gente memorizaba [las preguntas] y dejaba de ir a las clases teóricas». Este cambio «va a obligar a que la gente […] entienda lo que está aprendiendo».
Sin embargo, la principal novedad ha llegado en la prueba de conducción, ahora denominada ‘examen práctico de calidad’. Y es que, desde enero, la prueba ya se ajusta a la Directiva Europea 126/2006. El examinador debe evaluar si el aspirante realiza o no una conducción eficiente -si acelera y frena con suavidad, si circula en marchas largas siempre que sea posible… -; si no lo hace, se le sanciona con una falta leve. Según la subdirectora adjunta de Formación Vial de la DGT, Marta Carrera, «la conducción eficiente se debe enseñar en las autoescuelas porque lo exigen los tiempos». Por otro lado, la prueba práctica para el permiso B -el de turismos- tiene ahora una duración mínima de 25 minutos y se estructura en los cuatro apartados siguientes:
1.-Comprobaciones previas.
Antes de iniciar la prueba, el examinador solicita al aspirante que compruebe una serie de elementos del vehículo, como la presión de los neumáticos, el nivel del aceite, el funcionamiento de los parabrisas… El objetivo es que «los aspirantes conozcan mínimamente el vehículo. No queremos […] conductores inútiles», explica Carrera.
2.-Diez minutos de conducción autónoma.
En esta fase, el aspirante conduce de forma independiente y sin que el examinador le de ninguna indicación… salvo las básicas -por ejemplo, si debe pasar por algún punto en concreto-. Según Carrera, con esta prueba lo que se pretende es «rebajar la tensión inicial y que el conductor demuestre conocer las señales y que sabe desenvolverse en el tráfico». Además, durante esta fase y sólo de forma opcional, el aspirante puede utilizar el GPS e introducir -siempre en parado- el destino que le indique el examinador. Carrera ha justificado esta opción señalando que «la mayoría de los vehículos ya traen de serie este dispositivo».
3.-Conducción guiada.
El resto del examen, de unos 12 minutos de duración, es similar al ya conocido -el examinador indicará las maniobras a realizar- y mantiene los criterios anteriores -por ejemplo, el aspirante suspenderá de inmediato si su profesor toca los pedales auxiliares-.
4.-Comunicación del resultado.
Una vez que el aspirante concluya la prueba, el examinador le comunica -en presencia de su profesor- su resultado, explicándole brevemente -durante un máximo de dos minutos y sin entrar a discutir faltas concretas- cómo lo ha hecho. «Se trata de que el aspirante sepa en qué ha fallado -si ha suspendido-, para que pueda subsanar el error y poder rectificar su comportamiento en pruebas sucesivas», explica Carrera.
Por último, la directora de la DGT, María Seguí, ha justificado el nuevo examen señalando que «es la primera reforma en cantidad y calidad del examen de conducir [que se hace] en mucho tiempo, y con ella intentamos dar un nuevo impulso a la formación vial».
Ojo, la DGT quiere que te examines de nuevo… al renovar el carnet
Según las últimas declaraciones de María Seguí -directora de la DGT-, Tráfico está estudiando imponer, «a medio o largo plazo», un examen teórico para aquellos que tengan que renovar el carnet -ahora, sólo se exige superar una prueba de aptitudes psicotécnicas-. Seguí indicó que «es legítimo cuestionar la formación y conocimientos [de los conductores]» ya que, «con el paso de los años, las circunstancias y los vehículos con los que se examinaron los conductores han cambiado mucho».