Casi 25 años hace que se instauraron las nuevas matrículas en España, una vez Madrid fue la primera provincia que agotó las provinciales, llegando a la matrícula M-9999-ZZ. Estas matrículas, por cierto, fueron las sucesoras de las primeras que existieron, que eran también provinciales pero sin letras al final, sino únicamente con cifras numéricas (seis dígitos como máximo).
En ese momento, se discutía si darle continuidad a este formato, pasando a una hipotética matrícula M-0000-BBB, o cambiar a un formato más europeo y menos ‘estigmatizado’, eliminando el distintivo provincial.
Hubo defensores de ambas ideas, pero finalmente se optó por la segunda, diciendo adiós a distintivos provinciales como la M de Madrid, la B de Barcelona, la O de Oviedo o la MA de Málaga, por citar algunos.
Esto restó sentimiento de pertenencia a los coches que circulaban por nuestras calles y carreteras. Sin embargo, también ahorró algunos problemas derivados de precisamente portar un distintivo provincial. Desde este momento, se pudo comprar coches y matricularlos sin que se revelase de qué provincia procedía su conductor.
Eso fue en septiembre del año 2000, cuando se matriculó el primer coche en España con estas nuevas matrículas, luciendo la placa 0000-BBB. Desde entonces, se ha pasado por todas las letras, con algunas excepciones, y hoy 25 de abril la última matrícula que se ha visto es ****-NBG, toda vez se habían agotado las letras que comenzaban por la M días antes.
Queda por saber hasta cuándo durará este formato de matrículas actual, con cuatro números y tres letras. No se puede saber con exactitud, pero si nos basamos en que en 25 años se han consumido 10 letras, podemos estimar que las 11 restantes que quedan en el abecedario (recordemos que algunas no se utilizan, como la Ñ, la Q o las que empiezan por R o por cualquier vocal menos la U) se ‘gastarán’ en unos 30 años al ritmo de matriculaciones que vamos actualmente.
Esto es hablar por hablar, no obstante, pero no creo que sea del todo impreciso decir que este formato de matrículas de la actualidad podría estirarse hasta, aproximadamente, el año 2055. Quizá un poco antes… Ojalá, sería síntoma de un mercado que automovilístico que crece en nuestro país.
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