El trabajo realizado por los ingenieros de diseño ha sido sensacional. Y, pese a la insistencia sobre las líneas rectas de su fisonomía, que pretenden recordar al Clase G, su imagen resulta poco agresiva. Y es que EE.UU. es hoy en día un mercado convulsionado por diferentes paradojas: el tamaño de sus vehículos, el gasto de combustible y el desmesurado gusto por los 4×4.
Aquí Mercedes ha sabido jugar muy bien su baza reutilizando la significativa sigla «G», que representa al más mítico de los TT, mezclándola con un aire entre familiar y monovolumen que convierte al nuevo Clase GL en un objeto de deseo de un mercado millonario como es el norteamericano.
Para Europa, su tamaño le coloca más cerca de los SUT (pick up de ocio) que de los SUV (todocamino) de lujo. Con sus 5,08 metros de longitud, 1,92 de anchura y 1,84 de altura, éste siete plazas se posiciona como uno de los 4×4 más grandes y lujosos del mercado.
Habitáculo 8,5 ptos.
Las cotas exteriores, sobre todo la generosa batalla de tres metros, han permitido ofrecer un interior amplio no sólo en centímetros, sino también en terminaciones y equipamientos. Nada más acomodarnos en el puesto de conducción, se aprecia el perfecto trabajo realizado para ofrecer una butaca grande y cómoda, al tiempo que con buena sujeción lateral.
La información llega directa a los ojos sin tener que ir a buscarla, y también se agradece la perfecta colocación de los mandos e interruptores. Sólo la palanca del cambio, situada tras el volante, resulta poco convencional.
El acceso a la segunda línea de asientos es cómodo, y el espacio para ello prácticamente de limusina. Lo mismo ocurre con el espacio dedicado a las piernas, también de generosas dimensiones. Destaca como equipamiento posible para esta segunda línea la inclusión de sendas pantallas LCD para entretenerse con películas o videojuegos.
Respecto a la tercera línea de asientos, opcional, llama la atención la posibilidad del escamoteado eléctrico. Aquella permanece completamente oculta bajo el maletero y, tras accionar unos interruptores situados en éste, aparece completamente operativa en unos pocos segundos. El acceso a las dos plazas extra es completamente funcional para personas adultas, así como el espacio que éstas disponen para su acomodo.
En cuanto al maletero (de hasta 2.300 litros de capacidad), con cinco plazas dispondremos de una auténtica caverna (1.240 litros), mientras que con las siete ocupadas por personas, aún nos aprovecharemos de 300 litros.
Motor 8 ptos.
Las propuestas mecánicas son inherentes a la generosidad intrínseca del nuevo Clase GL, y sobre todo a su peso final. En total son tres las versiones V8 y una V6; sin lugar a dudas, suficientes de potencia en todos los casos como para ofrecer un comportamiento envidiable en cualquier circunstancia.
Es evidente que la estrella para Europa será el 420 V8 CDI (306 CV y 700 Nm de par), una propuesta generosa donde las haya. Aunque el menos exuberante 320 V6 CDI (224 CV y 510 Nm) también tendrá mucho que decir. En ambos casos se incorporado una inyección que trabaja a presiones de más de 1.600 bar y está asociada a inyectores piezoeléctricos que optimizan las prestaciones, los consumos y las emisiones.
En cuanto las mecánicas de gasolina, las dos propuestas son V8 y destacan también por un generoso empuje. El 450 V8 (340 CV y 460 Nm) se presenta como escalón de acceso y cuenta con una buena dosis de tecnología, mientras que el 500 V8 (388 CV y 530 Nm), con sus 5,5 litros, será, por el momento, la versión más potente.
Transmisión 9 ptos.
Los cuatros motores montan el magnífico cambio automático de siete velocidades 7GTronic, ya conocido por sus virtudes en los Clase M. Este cambio destaca por su eficaz funcionamiento en «D» y la agilidad manifestada por su gestión manual mediante levas tras el volante.
Además, como distinción a la sigla «G» y en exclusividad para el mercado europeo, el cambio se complementa de serie con la inclusión de reductora y bloqueos de diferenciales central y trasero, incluidos en el paquete de conducción off road.
Éste cuenta con ETS (control de tracción), que trabaja en comunión con el 4Matic (tracción a las cuatro ruedas) y el DSR (control de descenso de pendientes). Por su parte, el ABS es capaz de detectar y condicionar su funcionamiento en dos modos (asfalto y campo).
Suspensiones 8,5 ptos.
Aquí encontramos la misma tecnología vista en los Clase M: suspensión independiente a las cuatro ruedas con funcionamiento neumático Airmatic. El sistema es capaz de regular la altura de la carrocería y la dureza de la suspensión de forma activa y en consonancia con las circunstancias de la vía y los programas utilizados.
Así, la altura libre para el uso fuera de carretera puede llegar a los 307 milímetros, lo que permite afrontar vadeos de hasta 600 mm. Además, para el mercado europeo se monta una suspensión especialmente más enérgica, que evita balanceos, y una dirección menos desmultiplicada.
Por dentro y por fuera
El salpicadero, muy parecido al de su hermano el Clase M, ofrece un generoso equipamiento, al igual que una cuidadísima terminación. Los bloqueos de diferencial y la reductora serán de serie para el mercado europeo. El sistema de abatimiento de la tercera fila de asientos es de funcionamiento eléctrico, lo mismo que el cierre y la apertura del portón que da acceso al maletero.
Gracias a los dos bloqueos de diferenciales, central y trasero, y a la electrónica de la tracción, se corrige casi por completo la falta de recorridos libres efectivos de las suspensiones.
Con todas las plazas abatidas, la capacidad de carga alcanza los 2.300 litros.Aun con cinco plazas, el maletero ofrece una capacidad máxima de 1.240 litros.Con la utilización individualizada de la tercera línea de asientos, dispondremos de al menos 300 litros.
Bajo el piso del maletero está la rueda de repuesto, de tipo galleta.Pese al tamaño y larga distancia de ejes, este GL disfruta de unas excelentes cualidades off road en las condiciones más duras.La protección de bajos, compuesta por multitud de elementos plásticos y metálicos, se encuentra completamente integrada dentro del kit off road, que, a diferencia del Clase M, será de serie en su totalidad para los mercados europeos.
La toma de contacto se llevó a cabo con motores de gasolina, ya que los CDI no cumplen aún con las normas anticontaminación de California (EE.UU.), lugar donde se desarrolló esta primera prueba.
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Cómo va/comportamiento
Para poner en cuestión las cualidades del nuevo modelo presentado por Mercedes, el fabricante alemán optó por el país de los SUV por excelencia (EE.UU.) y también por el estado más restrictivo para ellos: California.
Aceptada la paradoja y tras un largo viaje transoceánico, nada más aterrizar en San Francisco, la primeras imágenes de nuestras retinas fueron sendos Hummer H2 con llantas de 24″ y perfil ultrabajo. No entendíamos nada- pero inmediatamente todo volvió a su sitio cuando una flota de Clase R 4Matic nos recogió para llevarnos en busca de los nuevos Clase GL.
Nada más llegar al lugar del inicio de la ruta notamos algo que nuevamente nos conmocionó: la ausencia de versiones CDI. La razón fue clara: las normas anti-emisiones californianas, equivalentes a nuestra futura Euro V, impiden que los motores CDI sean homologables en este estado americano. Nuestro gozo en un pozo.
Aceptada la situación, sólo quedaba disfrutar de un poderoso GL450.
Iniciamos ruta por la Autopista 101 y, tras cruzar el mítico Golden Gate en dirección a Sausalito, nos desviamos pronto por una pequeña carretera costera que nos alejase de la mirada de los «polis» y sus pistolas radar. Es un poco frustrante circular a 65 millas por hora (104,6 km/h) con 340 CV y 460 Nm de par.
Un pequeño despiste mirando el rutómetro hizo que nuestra parte trasera se saliera del asfalto en una pequeña carretera costera y, tras unos volantazos y la asistencia de la electrónica de la conducción, el susto se quedó sólo en anécdota. Después de un largo viaje paisajístico por la costa californiana y más de tres horas de pausada conducción, llegamos a Mapa Valley, cuna del mejor caldo californiano.
Aquí la organización preparó una suave zona 4×4, que gracias a la lluvia se había complicado un poco más de lo previsto.
Si durante el recorrido de asfalto pudimos apreciar la comodidad de la suspensión neumática y el eficaz funcionamiento del cambio automático, en el pequeño recorrido de campo apostamos por disfrutar un poco más del coche pese a lo mutilado del recorrido. Así, pudimos jugar con la regulación de altura de la suspensión para superar zonas comprometidas y también apreciar la diferencia de tarado del ABS en campo.
Afortunadamente, en una zona reservada para los periodistas especializados, pudimos poner a prueba los bloqueos de diferenciales y el resto de cualidades del sistema de transmisión 4Matic con reductora y bloqueos central y trasero. Resultado: bastante bueno.
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Ficha Técnica
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Equipamiento, Seguridad y Funcional
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El futuro en emisiones diésel
La tecnología Bluetec permitirá a Mercedes superar la directiva Euro V, que estará vigente a partir de octubre de 2009. Para ello utiliza un catalizador de oxidación y un filtro de partículas, al que de una forma controlada se le inyecta una solución acuosa en el colector de escape.
Las elevadas temperaturas de éste hacen que de la urea se desprenda amoniaco. Este elemento químico es el que hace que se descompongan los óxidos de nitrógeno de los gases de escape y de esta forma se libere nitrógeno y oxígeno. Para conseguir «el milagro» es necesaria además la utilización de gasóleo con bajos contenidos de azufre.
Un todoterreno para remolcar y personalizar
Con una capacidad de arrastre de 3.500 kilos y gracias al sistema de arranque en rampa, el Mercedes GL se distingue por su excelente generosidad para mover elementos pesados a su zaga. Además, bajo pedido se monta un sistema electrónico que corrige la desviación de la trayectoria producida por el remolque mediante el sistema (TSA), que no es sino una programación específica del ESP.
Los rivales
Dimensiones, habitabilidad y vocación de gama alta sitúan al nuevo Mercedes en dos diferentes subsegmentos del mercado.
Por un lado, hay dos todocamino de gama alta que encajan perfectamente con lo que ofrece el Clase GL: Audi Q7 y Volvo XC 90. Por otro, el GL con el paquete todoterreno puede ampliar su círculo de rivales con modelos todoterreno de siete plazas como los Jeep Commander, Land Rover Discovery, Mitsubishi Montero, Nissan Pathfinder y Toyota Land Cruiser.
Las versiones más lujosas y potentes de algunos de ellos no son capaces de llegar al nivel de refinamiento y prestaciones del alemán y tampoco sus precios son equiparables, si bien en otros casos sí que pueden suponer una interesante alternativa.
Por fuera
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