El nuevo Clase S Cabrio de Mercedes combina la elegancia heredada de los W 111 y W 112 Cabrio, que triunfaron en la época de los 60, con un diseño de los más atractivos del segmento y una tecnología de última generación; todo con el objetivo de crear el descapotable más cómodo del mundo, algo en lo que ayudan un avanzado sistema de protección contra el viento llamado Aircap y una calefacción repartida por sitios como el cuello –Airscarf-, el reposabrazos o el respaldo del asiento.
Por tanto, se extiende así la tradición de Mercedes en el terreno de los descapotables de lujo, que comenzó en los años ´20 y se prolongó durante su época dorada, la posguerra, con modelos tan exclusivos como el 170 S de 1949, el 220 de 1951 y el 300 S de 1952. Más tarde, comenzaron a llamar la atención los clásicos cabriolets 220 S y SE, elegantes modelos sin techo y con cuatro plazas bien diferenciadas hasta que llegó el SL W107, que consolidó el biplaza descapotable.
Este tipo de Mercedes son hoy en día, junto a Ferrari quizá, los clásicos más solicitados en las pujas, por lo que los precios van acordes a ello, alcanzando sumas de hasta 400.000 euros, como la que consiguió uno de ellos en el reciente Concurso de la Elegancia de Pebble Beach.