Sobre el Mirage hemos oído en Tokio opiniones encontradas, pero lo cierto es que esperábamos una propuesta más arriesgada después de ver aquellos primeros bocetos. Sin embargo, Mitsubishi ha optado por un diseño al estilo Nissan Micra, sobrio y frío, un concepto que suele funcionar bien en Japón, pero que en Europa encontrará una oposición muy fuerte con modelos mucho más atractivos, como el Ford Fiesta, el Seat Ibiza, el Renault Clio o el futuro Peugeot 208. Y es que todo parece indicar que el Mirage llega con carácter global, al igual que el Mitsubishi ASX. El interior sí que supondrá un paso adelante, y estará bien terminado, con buenos materiales y unos ajustes correctos.
El espíritu global del Mirage podría traer consigo un precio de venta más bajo que el del Colt, algo que servirá para animar las ventas en otros países emergentes. Podría optar por motores de gasolina de 1.0 litro, dejando de lado las mecánicas diésel.
Fotos: Javier Arús
