Desde este mismo verano, hemos asistido a la creciente demanda de patinetes eléctricos en la capital. Este tipo de transporte de alternativo, que se posiciona como una de las opciones más comunes para desplazarse por Madrid, no tuvo una regulación específica hasta el pasado 24 de octubre, momento en el que el Ayuntamiento ponía en marcha la Ordenanza de Movilidad Sostenible, y en la que se establecen una serie de normas para controlar su uso.
Como ya te contamos, los VMU —vehículos de movilidad urbana—, ya no pueden circular por cualquier sitio, aceras por ejemplo, sino que deben hacerlo por vías habilitadas para ello —las denominadas ciclocalles—, a una velocidad máxima de 30 km/h. Pero, como informan otros medios, la llegada de la Ordenanza de Movilidad Sostenible no ha terminado por atajar el problema del todo. Y es que la Policía de Madrid ha contabilizado, desde el pasado 22 de junio, hasta 22 accidentes: 8 de ellos fueron atropellos a peatones y el resto accidentes donde se lesionaron los portadores de los patinetes. Esto ha derivado en 16 heridos leves y dos graves. Como informa El Mundo, uno de los heridos graves fue un niño de 7 años ayer en el parque del Retiro.
Con motivo de la reciente entrada de la Ordenanza de Movilidad Sostenible de Madrid, la base de datos de la Policía está actualizándose para poder tipificar los accidentes con los diferentes tipos de patinetes eléctricos que existen. No obstante, y como señalan desde la Policía, el número de accidentes se reducirá en las aceras, pero se espera que los que se produzcan en las vías habilitadas para ellos aumenten.
La problemática también está en el estacionamiento
Pero la polémica por este tipo de transporte no solo reside en su circulación, también en su estacionamiento. Según la Ordenanza de Movilidad Sostenible, está permitido que aparquen en lugares reservados y aceras siempre que haya tres metros de espacio libre. Existe una excepción: prohibido aparcar en las zonas o calles que sean de especial protección.
Según la información de este diario, las empresas de alquiler de patinetes eléctricos son conscientes del problema y, por el momento, están optando por la concienciación de sus usuarios para que dejen correctamente aparcado el patinete eléctrico. No obstante, ya están estudiando sancionar económicamente a quien no respete las normas de estacionamiento. De hecho, la compañía sueca Voi ya ha multado a dos italianos con 25 euros cada uno por dejar mal aparcados sus patinetes eléctricos en la Gran Vía.
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