La cuenta atrás hacia el próximo Dakar empieza a tomar velocidad. El equipo Peugeot-Total desarrolla el Peugeot 2008 DKR con sus tres pilotos estrella; el primero, once veces ganador de la prueba, cinco de ellas en coches coches; el segundo, cinco, todas ellas en motos; y Sáinz, que fue ganador en 2010.
Château Lastours ha sido la base de pruebas del equipo Peugeot-Total donde su máquina, el Peugeot 2008 DKR se someterá a una nueva etapa de su desarrollo. Por primera vez, las tres parejas que conforman el `dream team´ de la marca se alternarán al volante. Después de las primeras pruebas de rodaje realizadas en Freneuse, Montlhéry y Creusot, el Peugueor 2008 DKR está listo para enfrentarse a unas pedregosas pistas que suponen una especie de adelanto de la aventura que se vivirá en América del Sur.
El objetivo del primer día de pruebas estaba orientado a la validación de las evoluciones introducidas en el chasis y en el sistema de refrigeración. El primero en tomar partida, el francés Stéphane Peterhasel. Toma asiento en el elevado habitáculo de este 2008 DKR. El campeón reconoció que, a medida que pasan los kilómetros, se enfrentaba a todo un choque cultural: «Esto de pasar a un dos ruedas motrices es un cambio de vida completo» comentaba, en broma, el piloto.
El resto de sesiones no hicieron más que conformar esa primera impresión del campeón francés: «No había conducido nunca un coche con tanto recorrido de suspensión. La primera gran sorpresa es la manera en que el Peugeot 2008 DKR absorbe las compresiones. Yo, que estaba acostumbrado a recibir sacudidas por todas partes, he descubierto un comportamiento muy eficaz pero con una gran suavidad. Allí donde temes un impacto, las suspensiones y las ruedas de gran diámetro absorben el bache. Ésta es una sensación muy buena y que permite pasar los agujeros a 120 o 130 km/h. en lugar de a 80 km/h. Deberé adaptar mi pilotaje a estas nuevas condiciones».
El siguiente turno fue para el novato Cyril Despres. El ex-motero, cinco veces ganador del Dakar en esta modalidad, empieza una nueva vida sobre cuatro ruedas. Después de conducir varias decenas de kilómetros, Cyril volvía a la base con lágrimas de emoción. «¡Esto es espectacular!» exclamaba impresionado con la experiencia vivida. «En todos los aspectos, en todos, es mucho mejor de lo que imaginaba. ¡Y aún estoy muy lejos del límite!». Seguidamente, confesaba a los ingenieros un pequeño error: «En un momento dado, me he desconcentrado, he fallado en una reducción y creo haber provocado un pequeño sobrerrégimen».
Por último, fue el turno de Carlos Sainz al volante del Peugeot 2008 DKR. Antes asistió al debut de Cyril Despres con la atención de un hermano mayor: «estoy convencido de que va a realizar un buen trabajo y estoy aquí para ayudarle en todo lo que pueda. Stéphane y otros pilotos han demostrado que los motoristas tienen las cualidades necesarias para brillar también en coche y Cyril es un competidor excepcional», decía el piloto español.
Después de las primeras pruebas del Peugeot 2008 DKR, los tres pilotos han elogiado la manera en la que absorbe las irregularidades del terreno, lo cual permite correr en tramos difíciles a una gran velocidad sin sentir violentos impactos.
El programa de pruebas diseñado por los ingenieros durante el verano no ha permitido a los tres equipos disfrutar de unas largas vacaciones. Las sesiones de pruebas se han encadenado a un ritmo sostenido y van a continuar hasta el envío de los coches a América del Sur.
