La firma italiana Pirelli trabaja en un concepto innovador: un neumático capaz de ‘hablar’ con la centralita del vehículo para mejorar la seguridad, el confort y las capacidades dinámicas.
La conectividad es un pilar básico en el futuro de la automoción, y los neumáticos no quieren estar al margen. Hoy en día, los avances en los neumáticos de cualquier fabricante son enormes, pero Pirelli está yendo un paso más allá. Desde 2002, lleva trabajando en un proyecto que tiene como objetivo que los neumáticos sean una parte más entre los sistemas interconectados de un vehículo.
Así, el sistema Cyber Car de Pirelli aporta un sensor adherido en el interior de la banda de rodadura capaz de enviar valiosos datos a la centralita del vehículo mediante tecnología Bluetooth. Son ya más de 300 patentes las que Pirelli ha completado en este campo, y su intención es que, en 2020, ya se comience a aplicar la tecnología Cyber Car en los primeros vehículos de producción.
Pero, ¿cuáles son los beneficios del sistema Cyber Car de Pirelli? Para empezar, el sensor con el que trabaja es mucho más completo que un sensor TPMS tradicional de los que se pueden acoplar a la válvula del neumático. O, dicho de otro modo, es capaz de medir muchas más variables. Entre las ventajas, que por supuesto engloban todas las de un sensor TPMS tradicional, podemos citar la capacidad que estos sensores tienen de saber cuál es el peso que recae sobre cada rueda, pudiendo detectar alguna anomalía o, incluso, adaptar la intervención del ABS o del control de estabilidad en función de la masa que recaiga sobre cada rueda.
Asimismo, de cara a los vehículos eléctricos, los neumáticos equipados con sistema Cyber Car, al ser capaces de medir el peso con el que carga el vehículo, colaboran a que la estimación de autonomía restante sea más precisa. La clave del sistema Cyber Car es mantener una comunicación constante con el coche, lo cual mejora su rendimiento, el impacto medioambiental, reduce el consumo de combustible e incrementa la seguridad.
