Vamos a intentar explicarte qué es lo que está pasando entre las marcas de coches europeas y muchas de las asiáticas que están llegando ahora a nuestro mercado.
Imagina que estás viendo una carrera de Fórmula 1. Es la última vuelta y hay un líder destacado. Lo tiene todo para ganar. Pero, de repente, levanta el pie, empieza a saludar al público, a darle las gracias a su equipo, a preguntar cómo van a celebrar la victoria durante los próximos días… Y, entre tanta distracción, se olvida de lo que realmente importa. Ni siquiera está trazando bien, así que deja un hueco enorme por el interior de la última curva. Entonces, aparece otro piloto, le adelanta y le arrebata la victoria. Ha aprovechado el hueco.

Pues básicamente eso es lo que está pasando: las marcas de coches europeas se están centrando en la electrificación absoluta, o casi, mientras que muchas de las asiáticas van aprovechando todos los huecos que las europeas van dejando libres para colocar sus productos.
Hace unos días, en una entrevista a José Antonio Galve, de MG, nos contaba esto mismo al preguntarle sobre el éxito de su marca en España. Y, ahora, vemos otro ejemplo en este SsangYong Torres, un modelo que nos ha presentado de forma estática la marca y que probaremos en apenas un par de meses. Y, la verdad, tiene buena pinta.
El Torres es un SUV de cinco puertas, cinco plazas y 4,70 metros. No está previsto que haya una variante de siete plazas, y se emplaza entre el Korando y el Rexton. El Torres estará disponible de inicio con un motor de gasolina 1.5 GDI Turbo de cuatro y 163 CV que podrá llevar cambio manual o automático (siempre de seis marchas) y tracción delantera o total.

Esto responde a la filosofía de la marca de seguir ofreciendo modelos muy válidos para campo, aún siendo un SUV. En el caso del Torres, y más allá de la tracción, ofrece una altura libre al suelo de 195 mm y ángulos de ataque, de salida y ventral de 18,2˚, 21,7˚ y 17,6˚, respectivamente.
Ahora mismo, es complicado acceder a un SUV de ese tipo por menos dinero. Lo ofrece DFSK, que tiene un 580 desde 24.495 euros y SWM con su G01 F desde 27.115 euros. No hemos probado el Torres aún en carretera, pero si nos hemos subido. Y, sinceramente, la sensación de del Torres es la de estar en un coche mejor hecho. Más de lo que la diferencia de precio indica.
Volviendo al motor, el Torres tendrá, por tanto, etiqueta C de la DGT, pero también podrá contar con la etiqueta Eco en caso de que optemos por incluir un sistema de alimentación por GLP, una alternativa que, como ocurre con otros modelos de la marca, se instala de forma oficial en los concesionarios de la marca por 2.750 euros y que mantiene la misma garantía del coche.

No se esperan otros motores de combustión para completar la gama, y es una pena porque un coche de este tipo pide a gritos un buen motor diésel… No lo habrá, pero la marca sí ha confirmado que, en 2024, habrá una versión 100% eléctrica.
El SsangYong Torres mide 4,70 metros de largo, 1,89 metros de ancho, 1,71 metros de alto y tiene una batalla de 2,68 metros. Esto le asegura una excelente habitabilidad, tal y como pudimos comprobar, con un maletero de 839 litros que puede alcanzar los 1.662 litros con los asientos traseros abatidos.
En cuanto al puesto de conducción, el coche tiene un aspecto moderno, y da sensación de estar razonablemente bien hecho y ajustado, aunque se ha sumado a la errónea moda de eliminar botones físicos en favor de las malditas pantallitas…
Independientemente de todo ello, la gran baza del SsangYong Torres va a ser su precio. La marca ya ha anunciado que se puede encargar, y eso significa que ya sabemos su precio: incluyendo la financiación y el descuento oficial, tienes un SsangYong Torres desde 31.000 euros, que es un precio francamente competitivo. La variante más cara (habrá cuatro acabados, así que será el acabado más alto, con tracción total y cambio automático) saldrá por 40.000 euros.
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