El equipo español Campos Racing ha desarrollado en el Centro de Investigación y Desarrollo de Barcelona -se han creado 15 nuevos puestos de trabajo- el súper deportivo que ves en las imágenes para el fabricante chino BAIC. ¿Su mayor particularidad? Que su motor es completamente eléctrico y cuenta con una autonomía aproximada de 300 km y una batería que se recarga por completo en unos 45 minutos. Este prototipo, que será presentado en unos días en el Salón del Automóvil de Pekín, mide 4,57 m de largo, 2,04 de ancho y tan solo 1,21 de alto, con una distancia entre ejes de 2,8 m.
Estas primeras fotos han sido tomadas en el Circuito de Cataluña, en donde los ingenieros de este equipo valenciano han posado junto a él. Este vehículo, para cuyo desarrollo se han utilizado tecnologías importadas de la Fórmula E, es capaz de acelerar de 0 a 100 km/h en 3,5 segundos y de alcanzar una velocidad punta de 260 km/h. Además, el reparto de pesos de este biplaza es del 45%-55%, lo que le permite seleccionar tres modos diferentes de conducción: Circuito, Confort y Eco.
Igualmente, la incorporación de la última tecnología permite incluso modificar estos modos de conducción desde el smartphone. Aun así, sus prestaciones revelan que no se ha olvidado de un comportamiento de lo más radical, para el que también cuenta con unas pinzas de freno de cuatro pistones y discos carbocerámicos de 380 mm, y con unos neumáticos 265/30 en el eje delantero y 315/30 en el trasero.
Por último, su diseño se caracteriza por un vinilo azul como distintivo tecnológico y el uso masivo de la fibra de carbono para reducir el peso lo máximo posible. Además, los pasos de rueda son enormes, y entre la línea descendente del techo y el alerón trasero mejoran su estabilidad. En el habitáculo, al que se accede a través de las puertas de estilo tijera, hay tres pantallas táctiles que manejan la configuración del vehículo, y los espejos retrovisores han sido sustituidos por cámaras de vídeo.