El fabricante británico de deportivos McLaren ha confirmado que llevará una sorpresa al Salón del Automóvil de Ginebra 2017, cita que tendrá lugar a mediados de marzo y en donde la marca presentará el motor que instalará el McLaren 720S -este nombre todavía no ha sido confirmado oficialmente-. Este futuro deportivo sucederá al exitoso 650S y formará parte de la segunda generación de coches pertenecientes a la Super Series de McLaren, cuya primera entrega comenzó en 2011 con el 12C y en la que se integra el actual 650S -hace aproximadamente dos años llegó también el 675LT-.
Este propulsor de gasolina será un bloque biturbo de 4.0 litros con 8 cilindros en V que ayudará al nuevo deportivo de la firma de Woking a completar la aceleración de 0 a 200 km/h en tan solo 7,8 segundos; no obstante, las cifras de velocidad máxima y de la aceleración de 0 a 100 km/h no han sido publicadas todavía. Además, desde McLaren afirman que el sonido también cambiará a mejor, y para ello instalarán una nueva línea de escape que hará las delicias de aquellos a los que les guste un sonido muy extremo y deportivo.
Además de lo anterior, el nuevo motor de McLaren será más potente, tendrá un par motor máximo más alto y la respuesta del acelerador será más rápida. A ello se le suma, asimismo, una estructura realizada en fibra de carbono que hará que el nuevo 720S pese 1.283 kg, que no solo mejora las prestaciones -tiene un centro de gravedad más bajo-, sino que incluye una entrada al habitáculo más confortable y con mayor amplitud, un interior con más espacio y una visibilidad mejorada.
