Esta misma semana conocíamos que el Plan PIVE 8, que finalizaba el 31 de diciembre de este año, se prorrogará hasta mediados de 2016, lo que, según GANVAM, ayudará a aumentar en un 9% las ventas de vehículos el año que viene y hará que se entreguen unas 125.000 unidades más de las que estaban previstas sin dicho apoyo económico –en el total se estiman unas ventas de 1.120.000 unidades aproximadamente-.
Y es que los vendedores han reconocido la importancia de los sucesivos planes PIVE, que ha jugado un papel fundamental en la recuperación del sector automovilístico y ha ayudado a romper este año la barrera del millón de unidades, con un crecimiento del 20,5%. No obstante, señalan que actúa como un dinamizador del consumo a la espera de que fluya el crédito, ya que la compra 8 de cada 10 coches son financiados.
Así, la rentabilidad de los concesionarios se situó en un 1,4% respecto al 0,7% del año anterior, con un área de ventas que con un 52% superó en 6 puntos porcentuales la aportación del año pasado. Sin embargo, todavía se debe recuperar el sector de la posventa, la cual va perdiendo cada vez más peso puesto que la media de edad del parque automovilístico español se sitúa en 10,2 años, prácticamente el doble que en 2009.