En 2018, la DGT francesa (Sécourité Routière) tomó la decisión de externalizar la gestión de los coches radar a empresas privadas. Desde entonces parte de los 400 -vehículos con radares móviles- que circulan por las carreteras galas vigilando la velocidad del resto, son conducidos por particulares. ¿Cuánto ganan los conductores de coche radar privados? No mucho, según revelan estos días los medios franceses.
Por un lado, debemos tener en cuenta que a los proveedores de servicios privados de coches radar -empresas concesionarias- no se les paga en función del número de multas sino del número de kilómetros recorridos. Si realizan menos se les reduce el importe a abonar. Tampoco pueden recorrer más, aplicándose en este caso una importante multa.
Según la publicación francesa L´Automobile Magazine, una de las empresas que gestiona la flota de coches radar privados del país ofrece trabajo como conductor de este tipo de vehículos por un importe de entre 22.000 y 25.000 euros anuales, según la región y la ciudad. Esto es 1.850 euros brutos , si bien a veces reciben una bonificación de unos 250 euros brutos al mes, recibiendo dietas para comidas, sin especificar.
Estos conductores pasan al volante toda su jornada laboral recorriendo cientos de kilómetros al día, horario nocturno incluido. Al tiempo que sufren, en ocasiones, la ira de los conductores multados. Se les pide que disfrute conduciendo vehículos en solitario, tener un saldo de al menos 10 puntos en el permiso y ser ejemplar en su conducción. También no tener antecedentes penales.
Los coches radar privados funcionan actualmente en 8 regiones del país, y creciendo. Lo más llamativo es que, desde la DGT francesa se contempla que a finales de 2025 la policía ya no esté al volante de estos vehículos. A partir de entonces, los coches radar serán conducidos íntegramente por particulares.
Las autoridades justifican esta medida con dos argumentos. Por un lado, para liberar tiempo para los agentes de orden público que pueden centrarse en otro tipo de tareas que requieran detener a los conductores, como controles de alcohol y drogas o control de permiso de conducir, de vehículos… Por otro, y no menos importante, optimizar los vehículos radar incrementando su tiempo de conducción (hasta 8 horas diarias).
Coche radar privado, cómo funcionan
A las infracciones detectadas por los coches radar privados se les aplica un margen generoso (el 10 por ciento para mediciones inferiores a 100 km/h y del 10 por ciento en las superiores), con el objetivo de evitar problemas con los recursos posteriores. Mientras que el margen de los fijos es claramente inferior, de 5 km/h en mediciones inferiores a 100 y de un 5 por ciento en las superiores.
Por otro lado, la protección de datos está garantizada. En ningún caso, afirman desde la web de la DGT francesa, ni el conductor ni la empresa privada tienen acceso a los datos registrados por el vehículo. La transmisión se realiza de forma automática y encriptada.
Actualmente hay alrededor de unos 400 coches radar en todo el país que se distribuyen en ocho regiones. En 2025 se incorporan tres regiones nuevas -Auvernia-Ródano-Alpes, Provenza-Alpes-Costa Azul y Occitania-por lo que el número podría ascender a 500 o 550.
Coche radar privado, ¿cómo detectarlos?
Pero ¿cómo se pueden detectar los coches radar conducidos por particulares? Al ser vehículos sin ningún tipo de distintivo, detectarlos no es sencillo, si bien hay un sitio web cooperativo que registra los vehículos con el modelo y color del mismo así como en ocasiones con la matrícula.
Pero hay «detallitos» que pueden darnos un indicio de que estamos ante un coche radar. Por un lado, por su caja ubicada en la parte delantera, en el salpicadero, por otro por un sensor ubicado normalmente en el parachoques delantero. Por detrás una pegatina en la luneta trasera que indica cámaras a bordo puede ponernos en la pista de ello.
