Este fin de semana se ha disputado el Rally Acrópolis de Grecia 2025, séptima prueba del Campeonato del Mundo de Rallyes (WRC). La prueba griega tenía su base en la localidad de Lamia, si bien el jueves se realizó la salida protocolaria en Atenas antes del primer tamo espectáculo.
Como siempre, el rally griego es una de las pruebas más duras del campeonato por los rotos que están sus caminos y las grandes piedras que suelen sacar los coches a su paso. Además, este año la cosa se complicó aún más debido a las altísimas temperaturas, que superaban por momentos los 40 grados.

En realidad, la prueba comenzó el jueves por la mañana con el shakedown en Lygaria, donde Thierry Neuville (Hyundai) y Takamoto Katsuta (Toyota) marcaron los mejores cronos, seguidos por Ott Tänak (Hyundai), a la postre el gran dominador de la carrera junto a Sebastien Ogier (Toyota). Esto quedó claro ya en el primer tramo, la superespecial de Atenas, donde Tänak y Ogier marcaron el scratch con el mismo tiempo.
El viernes arrancó el verdadero rally con la disputa de seis, con dos pasadas por los míticos Loutraki, Aghii Theodori y Elatia. Cinco pilotos distintos lideraron en algún momento, pero fue Tänak quien terminó el día al frente, aprovechando su buena posición de salida. El estonio lideró por apenas tres segundos a Adrien Fourmaux, con Sébastien Ogier tercero a 17 segundos.
Elfyn Evans, que abría pista por su liderato en el campeonato, sufría especialmente al tener que limpiar los tramos y se veía relegado al cuarto puesto al finalizar la etapa aprovechando los problemas de Neuville (que pinchó dos veces), y los Toyota de Rovanperä y Katsuta, que también pincharon en una ocasión y que, independientemente de eso, tampoco tenían ritmo como para luchar por el liderato.

Los Ford Puma, en manos aquí de los habituales MrErlean y Munster, además de Secks y el griego Serdiridis, se mantenían también en posiciones retrasadas. El mejor era Munster, quinto tras los problemas de los rivales.
La jornada del sábado fue decisiva. Tänak no levantó el pie y se adjudicó cinco de los seis tramos disputados, aumentando su ventaja en la general. Ogier se mantuvo como el único rival serio del estonio, pero no era capaz de seguir su estela y acababa el día a 43,6 segundos del de Hyundai. Fourmaux perdió más de un minuto tras golpear un talud que dañó su suspensión, aunque pudo seguir en carrera gracias a que le sucedió al final de un tramo previo a la asistencia.
Por detrás, Elfyn Evans optó por una estrategia conservadora para asegurar puntos y evitar errores, mientras Neuville seguía perdiendo tiempo por problemas mecánicos y un par de pinchazos más. Rovanperá abandonada tras salirse de pista y romper algo en el sistema de transmisión que le obligaba a detenerse definitivamente unos kilómetros después (ni el propio Kalle sabía si se había salido por la rotura, o la rotura provocó la salida), y en ese mismo tramo también se salía Takamoto Katsuta.

Peor suerte tenía Sami Pajari, cuyo Toyota debía abandonar al finalizar el viernes por un problema relacionado con el depósito de gasolina que no se pudo solucionar hasta el la última jornada.
El domingo quedaban cuatro tramos para cerrar el rally, incluido el mítico Tarzan, que, en su segunda pasada, iba a ser la Power Stage final. Tänak dominó los dos primeros tramos del día y parecía tener la victoria asegurada. Sin embargo, en la penúltima especial su Hyundai i20 N Rally1 comenzó a tener problemas preocupantes en la caja de cambios que hacían temer un abandono. Pese a ello, Tanak lograba llegar al parque cerrado de final de rally, consiguiendo así la primera victoria del año del equipo Hyundai.
Ogier aprovechó para sumar el mejor tiempo en el Power Stage y hacerse con los 5 puntos extra, además de los 7 del “superdomingo” (clasificación del domingo), terminando además el rally en segunda posición a 32,8 segundos. Fourmaux finalizaba tercero a más de tres minutos, con Evans cuarto y Neuville, tras todos sus problemas, quinto casi nueve minutos del líder.
En el campeonato, Elfyn Evans mantiene el liderato con 150 puntos, pero su ventaja se reduce: Ogier se coloca segundo con 141 y Tänak tercero con 138. El Mundial queda así más abierto que nunca de cara a la segunda mitad de la temporada. La próxima cita será el Rally de Estonia (17 al 20 de julio), donde Tänak, corriendo en casa, volverá a ser uno de los grandes favoritos. En Estonia no estará Ogier, quien está haciendo sólo parte de la temporada y que ha dejado descartada esta prueba.