
Parecía que Dani Sordo lo tenía todo para ganar en el Rally de España 2010 -oficialmente, RallyRACC Catalunya-Costa Daurada- su primera carrera del Campeonato del Mundo de Rallyes -WRC-: lleva uno de los coches más competitivos -Citroën C4 WRC-, corre en casa, la mayor parte del rally es sobre asfalto -su superficie predilecta-, ya no hay órdenes de equipo -Loeb se proclamó campeón del Mundo por séptima vez en el pasado Rally de Francia- y en la primera etapa, disputada este viernes sobre tramos mixtos de asfalto y tierra, contaba con la ventaja de salir en quinta posición que corresponde al puesto que ocupa en el WRC -así, los pilotos que le precedían en los tramos, es decir, Loeb, Ogier, Latvala y Solberg, le -limpiarían- la gravilla suelta de la pista, permitiéndole ser más rápido-.
Sin embargo, todo se empezaba a complicar para Sordo cuando la niebla hacía acto de presencia en el primer tramo, Terra Alta, de 35,94 km. Esta niebla no limitaba la visión de los pilotos, pero sí provocaba que la tierra se humedeciera, eliminando de un plumazo una de las ventajas del piloto español: la gravilla se fundía con el barro, con lo que ya no había que -limpiar- la pista. Dani acababa el tramo en quinta posición a 15,3 segundos de su compañero de equipo, Sebastien Loeb, que con su C4 se clasificaba en primer lugar seguido a 2,7 segundos del Ford Focus WRC del finlandés Jari Matti Latvala. Dani se quejaba de que, en estas condiciones, salir quinto se convertía en un problema, pues además de no tener la ventaja de encontrarse la pista limpia de gravilla, veía cómo su coche derrapaba más de la cuenta en las porciones de asfalto del tramo -recordemos que mezcla trozos de tierra con otros de asfalto- debido a la tierra que -sacaban- de las cunetas los pilotos que le precedían-
Sebastien Ogier, el piloto francés del equipo Citroën que le ha -quitado- el sitio en Citroën a Sordo para 2011 gracias a su excelente temporada -es segundo en el campeonato y ha ganado los rallyes de Portugal y Japón-, entraba tercero a 7,1 segundos de Loeb, mientras que el otro Focus de Mikko Hirvonen se clasificaba en cuarta posición a 10, 4 segundos del líder. Petter Solberg, el piloto noruego del Citroën C4 WRC con el número 11, perdía 20,5 segundos por una inadecuada puesta a punto de su C4 para estas humedades, sufriendo problemas de tracción en este tramo.
Los 14,97 km del segundo tramo, La Rivera d-Ebre, se disputaban por completo sobre tierra- y sin tanta niebla ni humedad. Sin problemas de tracción, Petter Solberg marcaba el mejor tiempo, precediendo a Sordo por 1,3 segundos y a Loeb por 2,0 segundos, quedando más atrás Latvala, Ogier e Hirvonen, que cedía su cuarto puesto de la general al cántabro. Parecía que la situación podría mejorar para Dani, pero no fue así: en los 12,07 km del tercer tramo, Les Garrigues, Sordo volvía a clasificarse sexto a 10,6 segundos del scratch -mejor tiempo- de Loeb, con lo que el cántabro caía hasta el sexto lugar de la general tras Hirvonen (5º) y Solberg, que empezaba a remontar hasta la cuarta plaza.
Los tramos de la tarde, que eran la repetición de las tres primeras especiales del día, no traían cambios para Sordo. Sin niebla ni humedades, tampoco había que -limpiar- la pista, pues la posible gravilla desaparecía tras el primer paso de todos los participantes por los tramos. Dani Sordo afianzaba en estos tramos un decepcionante sexto puesto a 54,7 segundos de Loeb, líder del rally, por lo que la posible victoria del español es- ciertamente improbable. Por su parte, el propio Loeb ha visto cómo Sebastien Ogier, con su C4, le recuperaba 9,8 segundos tras los tramos 4 y 5, devolviéndole Loeb el -golpe- a Ogier en el sexto y último tramo del día al endosarle 1,4 segundos para terminar con una escasa ventaja en la general de 3,8 segundos. Jari Matti Latvala terminaba tercero a 19,9 segundos tras una muy buena primera etapa, precediendo a un Petter Solberg que, si no hubiera sido por los problemas de tracción del primer tramo, podría haber estado en la lucha por el primer puesto -el noruego ha terminado a 22,4 segundos- y en el primer tramo ya perdió 20,5 segundos-. En la quinta plaza, un tanto -en tierra de nadie-, se encuentra el Ford Focus WRC de Hirvonen.
Respecto a los demás pilotos españoles, cabe destacar el sólido liderazgo del lanzaroteño Yeray Lemes en la categoría Junior, pues su Renault Clio S1600 aventaja en 44,9 segundos a su más inmediato perseguidor, el holandés Weijs -Citroën C2 S1600-. Por último, citar la mala suerte del recién proclamado campeón de España de Dos Ruedas Motrices, Joan Vinyes -Suzuki Swift S1600-, que arrancaba una rueda trasera de su coche en el primer tramo; al menos, espera poder reparar su Suzuki para tomar la salida mañana.