Bajo el capó encontramos el mismo motor 1.8 turbo que equipa el Mégane R.S., pero potenciado hasta los 300 CV -el R.S. se conforma con 280 CV-. El par máximo es de 420 Nm con la caja automática -420 Nm con la manual-. Este incremento de la potencia y par se consigue mediante la actuación en el turbocompresor -utiliza un rodamiento cerámico en la turbina- y el sistema de escape. La caja de cambios, como decimos, puede ser manual o la automática de doble embrague EDC con seis velocidades.
Este propulsor ha sido optimizado para cumplir con la nueva normativa de emisiones Euro6d Temp. Para ello cuenta con sistema Start/Stop y con filtro de partículas, una solución hasta ahora limitada a las mecánicas diésel y que cada vez encontramos con más frecuencia en los motores de gasolina. Con todo esto, el consumo homologado -aún en ciclo NEDC- es de 8,1 l/100 km con unas prestaciones más que interesantes: acelera de 0 a 100 km/h en 5,7 segundos y alcanza una velocidad máxima de 260 km/h.
Chasis Cup de serie
Esta versión se caracteriza por equipar de serie el chasis Cup, que incluye suspensiones más firmes y un diferencial de deslizamiento limitado mecánico Torsen. Por supuesto, incorpora el conocido sistema 4CONTROL de cuatro ruedas directrices y amortiguadores con topes hidráulicos de compresión. Asimismo, el Mégane R.S. Trophy añade frenos de disco delanteros bimaterial -de aluminio y fundición-, pinzas Brembo pintadas en rojo, llantas de 19 pulgadas específicas y neumáticos Bridgestone de altas prestaciones en la dimensión 245/35 R19. De manera opcional se pueden elegir unas llantas más ligeras para reducir el peso alrededor de 2 kg por rueda. Los discos son de 355 mm en el eje delantero y de 290 mm en el trasero. El peso en orden de marcha es de 1.419 kg.
En marcha, permite elegir diferentes modos de conducción mediante el sistema Multi-Sense. Además, integra el aplaudido sistema de iluminación R.S. Vision -con ledes multirreflectores- y el dispositivo de telemetría y recogida de datos R.S. Monitor. En el interior los cambios son mucho menos notables, aunque los clientes de la firma pueden equipar su Trophy con una nueva generación de asientos deportivos Recaro revestidos de Alcantara.
El nuevo Mégane R.S. Trophy coge el testigo de las generaciones anteriores en lo que a deportividad se refiere. El primer modelo llegó en 2005 y, seis años más tarde, haría aparición su segunda generación, con una mecánica de 265 CV. Esta versión presentaría en 2014 una edición limitada, denominada 275 Trophy, con un motor potenciado hasta los 275 CV. Ahora, la marca francesa presenta su generación más prestacional, con 300 CV y argumentos más que suficientes para convertirse en uno de los compactos deportivos más prestaciones y divertidos del momento.