El Toyota Yaris 120H es un modelo que sólo se vende con cinco puertas y tiene 3,94 metros de largo. Su mecánica de 116 CV combina un motor de gasolina de tres cilindros y 1.5 litros con otro eléctrico, tiene una caja de cambios automática y tracción delantera.
Su consumo real se sitúa en torno a los 4-4,5 L/100 km en una utilización mixta ciudad-carretera. Cuanto más nos movamos por ciudad, más cerca estaremos de esos 4 L/100 km, cifra que incluso es relativamente fácil de rebajar en atascos, mientras que si nos movemos más carretera, más cerca nos iremos de los 4,5-5 L/100 km.
En esta entrada te mostramos cuatro posibles alternativas al Toyota Yaris 120H, todas con etiqueta Eco de la DGT. Empezaremos con los datos, y después te mostramos las claves para decidirse por uno u otro.
| Toyota Yaris | Ford Fiesta | Hyundai i20 | Kia Rio | Renault Clio | |
| Longitud | 3,94 metros | 4,06 metros | 4,06 metros | 4,06 metros | 4,05 metros |
| Maletero | 270 litros | 311 litros | 262 litros | 325 litros | 254 litros |
| Tecnología | Híbrido | Microhíbrido | Microhíbrido | Microhíbrido | Híbrido |
| Cambio | Automático | Manual, 6 vel. | Manual, 6 vel. | Manual, 6 vel. | Automático |
| Consumo medio oficial | 4,1 L/100 km | 5 L/100 km | 5,1 L/100 km | 5,2 L/100 km | 4,2 L/100 km |
| Aceleración 0-100 km/h | 9,7 segundos | 9,3 segundos | 10,4 segundos | 10,2 segundos | 9,3 segundos |
| Precio | Desde 22.400 euros | Desde 21.521 euros | Desde 23.690 euros | Desde 21.023 euros | Desde 21.992 euros |
| Etiqueta | Eco | Eco | Eco | Eco | Eco |
Ford Fiesta 1.0 EcoBoost 125
Es el que presenta un planteamiento más deportivo tanto por diseño (ya sólo se comercializa con el acabado ST-Line) como por comportamiento, pues es el que tiene un comportamiento más ágil y vivaracho del grupo. También es el segundo más barato, tras el Kia.
Frente al Toyota, nos gusta más para viajar por carretera, sobre todo si son secundarias de curvas y nos gusta tener un tacto más deportivo. El motor recurre a un sistema de microhibridación, por lo que su respuesta también es más intensa.
Se queda por detrás del Toyota en comodidad, pues su suspensión es más firme y seca, y en consumo, pues lo normal es estar entre los 6 y 6,5 L/100 km.
Hyundai i20 1.0 T-GDI 100 48V
Acaba de recibir un restyling y es uno modelo bien hecho, con un chasis muy equilibrado entre comodidad y comportamiento y un interior muy agradable. Recurre a un motor 10 turbo microhibridado y tiene cambio manual de seis marchas.
Entre las partes menos positivas, encontramos con que es el menos potente y, por tanto, el más lento del grupo. Hay una versión de 120 CV, pero va unida al acabado N Line y aún no está a la venta… aunque la que había anterior al restyling se situaba en 29.000 euros. De hecho, con este motor de 100 CV ya es más caro que los otros cuatro modelos.
También tiene poco maletero, como el Clio y el Yaris: 262 litros. Y, por consumo real, se mueve en los mismos términos que el Fiesta.
Kia Rio 1.0 T-GDI 120 48V
Es pariente directo del i20, así que muchas de las virtudes del Hyundai son extrapolables al Kia. Es un coche cómodo, que va bien de chasis y emplea el mismo motor 1.0 turbo microhibridado, pero en este caso con 120 CV. Además, es el que tiene más maletero del grupo (325 litros) y, también, el más barato, con un equipamiento de serie bastante bueno.
Con todo, es probablemente la mejor alternativa al Yaris, aunque hay que tener en cuenta un par de cosas: no es automático, y eso aporta comodidad de conducción en ciudad, y su consumo no es tan bajo como el del Yaris, pues se mueve en los 6-6,5 L/100 km del Fiesta o del i20.
Renault Clio E-TECH
Es el que apuesta por una mecánica más parecida a la del Toyota, pues se trata de un híbrido con un motor de gasolina y dos eléctricos. Acaba de recibir un restyling que, además de retocar su diseño, le ha permitido mejorar su equipamiento sin aumentar de precio.
Frente al Yaris, en ciudad llega a consumir incluso algo menos, y su caja de cambios automática consigue que el motor no sea tan escandaloso cuando el motor térmico entra en acción. También da una sensación de mayor calidad que el Toyota por el aspecto de su pantalla o el tacto de algunos plásticos.
Por el contrario, es el que menos maletero tiene y, en carretera, no nos convence tanto. Es cierto que en aceleración pura es el más rápido pero, cuando se queda sin batería (algo que sólo conseguiremos si realizamos una conducción exigente de forma continuada), pierde demasiadas prestaciones.
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