La DGT implantará, antes de que finalice el presente año, un nuevo examen teórico de conducir. Su fin será garantizar más seguridad y conocimiento de la conducción por parte de los futuros conductores, que tendrán que saber detectar y actuar ante cualquier peligro. ¿Que cómo lo harán? Con un vídeo en plena prueba que reproducirá diversas situaciones de la circulación. Por ejemplo: un peatón circulando por la carretera de noche sin chaleco reflectante, el adelantamiento a una bicicleta sin la suficiente distancia de seguridad de metro y medio, etc.
Entonces, los alumnos tendrán que identificar los posibles riesgos y responder a las preguntas que se hagan sobre dicho vídeo. De esta manera, la DGT quiere que se prioricen las situaciones prácticas sobre la memorización de datos, pudiendo experimentar desde el primer momento escenas cotidianas que se pueden dar diariamente al volante. Por su parte, la Confederación Nacional de Autoescuelas Españolas –CNAE- se ha quejado por no tener conocimiento de esta modificación, habiendo tomado la DGT una decisión de este calado sin tener en cuenta a este organismo.
Además, según CNAE, sorprende que el alumno tenga que decidir ante situaciones prácticas de la conducción sin haber empezado aún con las clases prácticas, defendiendo que son ambas partes -teórica y práctica- las que servirán como base a los examinados para tomar las decisiones pertinentes ante situaciones de riesgo potencial. Por último, la falta de ordenadores en algunas autoescuelas hace que no en todos los centros se obtenga el carnet de conducir teórico de la misma manera.
