Así es el restyling de los Skoda Rapid y Spaceback
El Salón Internacional del Automóvil de Ginebra 2017, que abrirá sus puertas a mediados de marzo, ha sido el escenario elegido por el fabricante checo Skoda para la puesta de largo de las nuevas versiones de sus modelos Rapid y Spaceback. De este modo, ambos vehículos de bajo coste reciben una actualización, y sus nuevas versiones 2017 se diferencian de sus antecesores en todos los aspectos: estética, calidades interiores, tecnología, conectividad, equipamiento y mecánica; no obstante, los cambios realizados son bastante ligeros.
En lo que se refiere a su aspecto exterior, el frontal cuenta con unos nuevos faros bixenón con luces LED diurnas -opcionales-, mientras que los pilotos de la zaga también han sido modificados levemente -en los dos se subraya la firma luminosa LED-. Por su parte, los paragolpes también han sido rediseñados, y los delanteros ahora incorporan unos faros antiniebla que han crecido en tamaño. Además, la luneta posterior del Skoda Spaceback también es más grande, y los dos modelos añaden llantas de aleación de nueva hechura en medidas de 15, 16 y 17 pulgadas.
Interiormente, Skoda ha sustituido la tapicería y gran parte de la botonera que ocupa la consola central por otra tela y nuevos materiales que convierten a estos elementos en más agradables al tacto; asimismo, han renovado su diseño y se han añadido nuevas molduras decorativas. El equipamiento más destacado en estas nuevas versiones pasa por los nuevos sistemas de infoentretenimiento Amundsen y Swing, así como por conectividad WLAN, con dispositivos móviles y dos puertos USB en la fila de asientos posterior.
Para terminar, la gama mecánica ha sido actualizada con la inclusión de un nuevo propulsor gasolina 1.0 TSI con tres cilindros y una potencia de 95 o de 110 CV. Por lo demás, los otros motores disponibles para ambos coches son el 1.4 TSI de 125 CV para cerrar la oferta de gasolina, y los 1.4 TDI de 90 CV y 1.6 TDI de 115 CV para conformar las alternativas de gasóleo.